Los rodajes en las calles de París con figurantes vestidos de policías o militares uniformados, susceptibles de ser atacados, se han restringidos temporalmente en el marco de las medidas excepcionales del dispositivo antiterrorista.
"Es una medida de sentido común", afirmó a Efe un responsable del servicio policial que concede las autorizaciones para rodajes, que precisó que lo único que se ha prohibido es "la utilización de figurantes en uniforme de policía o de militar".
"Desgraciadamente, las personas en uniforme se han convertido en objetivos y podrían ser agredidos por malintencionados", señaló el responsable para justificar esta medida, que no se sabe cuánto tiempo va a estar en vigor.
El portavoz policial dijo no tener conocimiento de que esta disposición haya afectado directamente a algún rodaje que ya estuviera en marcha.
Las películas que se graban en las calles de París deben recibir el visto bueno del Ayuntamiento y de la Prefectura de Policía.
El pasado martes, un hombre que estaba siendo vigilado por los servicios secretos franceses por representar una potencial amenaza terrorista agredió con arma blanca a tres militares que estaban protegiendo un centro judío en el centro de Niza e hirió de levedad a dos de ellos.
Ha sido el acto más grave contra las fuerzas de orden público que participan en el dispositivo antiterrorista Vigipirate desde que el presidente de Francia, François Hollande, decidiera reforzarlo masivamente tras la oleada de atentados terroristas de comienzos de enero.
Además de sacar a la calle a miles de policías y gendarmes suplementarios, Hollande también decidió movilizar a 10.500 militares, que se ocupan de vigilar cientos de instalaciones sensibles, incluidas instituciones judías y musulmanas.