En los últimos días, el gobierno ha sostenido varias reuniones con todos los partidos del espectro político para ultimar los detalles de la Ley Orgánica Constitucional (LOC) que, en el marco de la agenda de descentralización, establecerá los requisitos e inhabilidades para postular a ser intendente, una vez que entre en vigencia la elección democrática del cargo.
Parte de las cosas que ya se habrían resuelto entre ambas partes es la propuesta del Ejecutivo para que, en materia de inhabilidades, los parlamentarios en ejercicio puedan competir por una intendencia sin necesidad de renunciar a su cargo, el que tendrían que dejar sólo en caso de ser electos como intendentes.
Esto replica la situación que ocurre en la actualidad, cuando diputados o senadores enfrentan una contienda parlamentaria o si alguno tiene interés en disputar la Presidencia de la República.
No obstante, para el resto de los interesados -alcaldes, concejales y consejeros regionales, además de quienes ejerzan cargos de confianza en el gobierno, como ministros, subsecretarios y los mismos intendentes-, sí existiría la obligatoriedad de renunciar en caso de que quieran competir para transformarse en intendentes.
Una de las opciones que se barajan en La Moneda, en el caso de las autoridades antes mencionadas, es emular la legislación que actualmente rige las elecciones municipales, que estipula que se debe dejar el cargo 90 días antes del momento en que se deben declarar las candidaturas a primarias o a la elección propiamente tal, según sea el caso, en el entendido de que tanto los jefes municipales como los funcionarios gubernamentales podrían emplear su posición en beneficio de una eventual campaña.
Esto, de todas maneras, es una concesión a estas autoridades, pues inicialmente se había abordado la posibilidad de que se rigieran por la misma inhabilidad que aplica a quienes aspiren a ser candidatos a parlamentarios, la que es de un año antes de la elección.
Fórmulas
Sin embargo, en octubre pasado, el ministro de la Segpres, Nicolás Eyzaguirre, ya había adelantado un criterio preliminar por parte del gobierno. Aquella vez, el secretario de Estado sostuvo una reunión con el presidente de la Cámara de Diputados, Osvaldo Andrade (PS), para discutir la tramitación de la reforma que habilita la elección de intendentes.
Tras esa reunión, el ministro comentó que "estamos trabajando con la Nueva Mayoría, y estamos cerca de un protocolo común, que establece que aquellas autoridades -intendentes, gobernadores- que quieran ser gobernador regional, no tengan las mismas inhabilidades que los candidatos al Parlamento, que tienen que haber renunciado un año antes, sino que, como es normal en las elecciones locales, la persona haya renunciado a su cargo antes de la declaración de candidaturas".
La propuesta, en todo caso, aún está siendo trabajada por la Segpres.
De hecho, el subsecretario de esa cartera, Gabriel de la Fuente, se reunió ayer en la mañana con representantes de Chile Vamos en La Moneda para abordar el tema. Y lo mismo hizo el jueves pasado con dirigentes de la Nueva Mayoría.
El ministerio, además, se comprometió a hacer llegar a los partidos, en los próximos días, un documento con los detalles que contemplaría el texto de la Ley Orgánica Constitucional que debe ser ingresado al Congreso, lo que está previsto para esta semana.
Quienes han participado de estas conversaciones afirman que el Ejecutivo ha evaluado, además, la posibilidad de impulsar en la Ley Orgánica Constitucional una norma transitoria que exima a algunas autoridades de la exigencia de renunciar a sus cargos con antelación, permitiéndoles poder postular en la primera elección de intendentes, prevista para este año.
La posibilidad de que esta norma transitoria se aplique, pero estableciendo de forma permanente en la ley -para las futuras elecciones de intendentes- la obligación de renunciar un año antes, fue cuestionada ayer desde la oposición.
Por ejemplo, el secretario general del PRI, Eduardo Salas -quien ha participado de las conversaciones con el Ejecutivo-, señaló que "si bien Chile requiere más democracia en las regiones, de esta manera improvisada podemos terminar con más problemas que los que tenemos".
Salas agregó que "es complejo que el gobierno presente un proyecto de ley donde en lo permanente se planteen incompatibilidades de las actuales autoridades y que estas tengan que renunciar un año antes para ser candidatos, pero que haya una norma transitoria para permitirlo. Eso es no competir en igualdad de condiciones".
Aunque aún no hay claridad respecto de si será o no posible la entrada en vigencia de la elección de los intendentes -que se llamarán gobernadores regionales- durante este año, la propia Presidenta Michelle Bachelet manifestó que su voluntad es que así ocurra, lo que fue reiterado ayer desde el Ejecutivo.
"El compromiso de la Presidenta Michelle Bachelet con la agenda de descentralización es total y absoluto. Como gobierno estamos llevando adelante el cumplimiento del programa, que considera este aspecto como fundamental. Haremos todos los esfuerzos necesarios en el Congreso para que se pueda realizar de forma cabal esta reforma", remarcó ayer la ministra de la Secretaría General de Gobierno (Segegob), Paula Narváez, al ser consultada acerca del tema.