El Parlamento griego votó el domingoa favor del programa económico de austeridad con el que se activará el rescate  financiero del país y su mantenimiento en la zona euro solicitados por los  acreedores del país.

El plan aprobado impone duras medidas de austeridad a cambio de un nuevo acuerdo de rescate de US$ 171.000 millones por parte de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional. A ello se suma un pacto con los acreedores privados para reducir la deuda soberana del paí­s en US$ 132.000 millones.

El texto prevé la reducción del 22%  del sueldo mínimo, que se queda en 586 euros brutos sobre 14 meses, la  supresión en el año de 15.000 empleos públicos y nuevos recortes de algunas  jubilaciones.

El debate comenzó poco después de las 3:30 de la tarde hora griega, y duró pasada la medianoche. El plan fue aprobado por la mayoría de los legisladores, incluso socialistas, por 199 a favor y 74 en contra.

Poco antes de la votación crucial para el país y la zona euro, el Primer ministro griego Lucas Papademos dijo que los diputados griegos "asumirán su  responsabilidad" y "definirán la elección más importante" para Grecia, que es "avanzar con Europa y la moneda única".

"La violencia y la destrucción no tienen lugar en una democracia", añadió  el Primer ministro, al referirse a las violentas manifestaciones ocurridas en  la capital griega el domingo por la noche contra el programa económico  presentado a la aprobación de los diputados.

Papademos recordó que los tres objetivos del plan son el saneamiento de las finanzas públicas, el restablecimiento de la competitividad del país y el  refuerzo de su sistema bancario.