El Parlamento irlandés (Dáil) aprobó hoy en votación el acuerdo sellado por el Gobierno con la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) para acceder a un plan de rescate valorado en 85.000 millones de euros, al que Dublín contribuye con 17.500 millones.

Con 81 votos a favor y 75 en contra, el Ejecutivo irlandés logró así dar legitimidad parlamentaria al texto del llamado "Memorándum de Entendimiento" acordado el pasado 28 de noviembre con la UE y el FMI.

El Gobierno sacó adelante la votación gracias al apoyo de algunos diputados independientes, mientras los partidos de la oposición rechazaron el acuerdo y abogaron por una renegociación.

Durante el debate de más de dos horas, el ministro irlandés de Finanzas, Brian Lenihan, se declaró "perplejo" por el rechazo de la oposición al plan de rescate, al tiempo que calificó de "irrisibles" las posibilidades de abrir el próximo año un proceso de renegociación con el FMI y la UE.

Para el principal partido de la oposición irlandesa, el conservador Fine Gael (FG), los términos del acuerdo son "totalmente obscenos", según afirmó en el Dáil su portavoz de Finanzas, Michael Noonan.

El dirigente opositor insistió en que algunos puntos del texto deben ser renegociados, como el interés del 5,8% impuesto a Irlanda para devolver el fondo de rescate, que consideró demasiado alto y esgrimió para acusar a sus socios comunitarios de poco "solidarios".

Noonan también acusó al Gobierno de cometer graves errores en la gestión de la crisis, sobre todo en lo que se refiere al agujero del sistema bancario nacional, que, dijo, el Ejecutivo se empeñó en rescatar con dinero público.

En su opinión, la deuda pública del Estado era "manejable" hasta que se le añadió la de los bancos, en los que ha inyectado desde 2008 más de 35.000 millones de euros para hacer frente a sus deudas y lo que ha provocado que el déficit público se haya disparado hasta el 32% del Producto Interior Bruto (PIB).

La UE y el FMI ofrecieron el fondo de rescate a cambio de que Irlanda acometa durante los próximos cuatro años un severo plan de ajustes por un valor de 15.000 millones de euros, lo que debería rebajar el déficit público hasta el 3% del PIB en 2014.

Según el acuerdo, Irlanda podría lograr una prórroga de un año, hasta el 2015, para lograr ese objetivo, aunque Lenihan precisó que la extensión sólo será necesaria si no se cumplen las previsiones económicas del Gobierno.

El Dáil también debate hoy un nuevo proyecto de ley con el que el Gobierno quiere dar a su ministro de Finanzas más poderes para acometer la reestructuración del sistema bancario nacional, según lo acordado con la UE y el FMI en el plan de rescate.