Durante esta mañana los trabajadores de la empresa Subus del Transantiago comenzaron una movilización que impide la salida de los buses desde los terminales. Esta medida afecta al menos diez comunas de la capital. Los trabajadores solicitan una mejora salarial de $50.000, instalaciones de baños y el respeto de su descanso.

Desde el Directorio de Transporte Público Metropolitano (DTP) implementaron un plan de contingencia que involucra buses de otras empresas para realizar servicios de apoyo en los principales recorridos que realiza Subus.

El seremi metropolitano de Transportes, Matías Salazar, comentó que la empresa y los trabajadores se encuentran en un proceso de negociación colectiva, "lo que nos interesa es que las demandas puedan hacer satisfechas para que no afecten al transporte público ni a los usuarios", señaló en entrevista de Radio Cooperativa.

Además, sostuvo que se encuentran trabajando en conjunto con el ministerio del Trabajo, "le hemos pedido a la Dirección del Trabajo para que se pueda llegar a un acuerdo entre los trabajadores y la empresa".

Por su parte, el vocero de Sindicatos Unidos, Boris Guerrero, criticó que los funcionarios nunca han podido negociar con la empresa "que siempre pone sus intereses por sobre de los trabajadores", además puntializó que quieren "firmar un contrato colectivo con la ciudadanía y de cara a la gente".

La empresa Subus informó que en todos los terminales de la compañía se está normalizando el servicio luego de que algunas máquinas salieran a realizar los recorridos, sin embargo, parte del personal continúa el paro.

El vocero de los Sindicatos Unidos realizó un positivo balance de la manifestación: "Ha sido todo un éxito, nosotros logramos paralizar en la hora punta". Guerrero lamentó que el costo lo tengan que pagar los usuarios, pero "es la única herrrmienta que tenemos los trabajadores", señaló.