Un total de 10.665 consultas médicas de especialidad no realizadas y 801 cirugías suspendidas, es el último balance del impacto que ha generado el paro de 22 días que mantienen los funcionarios del  Hospital del Salvador, en rechazo a la concesión del recinto de salud.

Se trata de una movilización que ha causado estragos en la atención de los pacientes, quienes han debido amoldarse al plan de contingencia aplicado en el recinto para suplir la falta de personal y que incluye compras a privados, contrataciones y traslados de enfermos, entre otras medidas.

Según el director del Hospital del Salvador, Carlos Altamirano, el 40% de las camas ha debido cerrarse  y solo se otorga atención de urgencia en los policlínicos.

 "Hemos gastado casi $ 90 millones en contratación de recurso humano, para reforzar las áreas donde no tenemos personal a causa del paro y alrededor de $ 500 millones para la compra de camas en el sistema privado. Esto no es menor si llevamos una veintena de días  en esto y los recursos del hospital se ven comprometidos", explicó.

Por falta de pabellones y camas se han derivado a la fecha unos 50 pacientes a hospitales públicos de la capital y a recintos de la red privada como clínica Indisa, U. de los Andes, Los Coihues, Fundación Arturo López Pérez, Clínica Colonial y Clínica Cordillera. También se dio de alta a 1.016 personas para generar nuevos cupos de hospitalización.

Altamirano reconoció que la situación es "compleja, porque solo se trabaja con el servicio de urgencia, lo que significa que todos los días hay que reagendar horas de pacientes. Las familias traen a sus enfermos acá porque viven en las comunas que dependen de este centro y han tenido que trasladarse al hospital de Maipú que queda lejos", agregó.

Por esto la dirección abrió sumarios contra 270 trabajadores que están en paro.

CONCESIÓN SIGUE EN PIE

Ayer fue la jornada más álgida de un conflicto gremial que escaló con una movilización improvisada, en el frontis del hospital, que suspendió el tránsito y terminó con 11 personas detenidas. Luego, cerca de las 11.00, un grupo de funcionarios del recinto irrumpió en  La  Moneda, tras pasar inadvertidos entre un grupo de visitantes. Allí, los dirigentes sacaron un lienzo en repudio a la  concesión del Hospital del Salvador e iniciaron una protesta que fue rápidamente contenida por la guardia de palacio y que dejó a tres funcionarios detenidos.

Raúl Villanueva, vocero de los funcionarios, dijo que la movilizacion seguirá. "Vamos a seguir en paro porque la exigencia es una sola: el término de la concesión".

Esta solicitud, sin embargo, fue descartada ayer por la ministra de Salud, Helia Molina. "Ellos tienen una posición bastante cerrada con respecto de la concesión, pero ese un hecho de la causa, nosotros no podemos revertir contratos que ya están tomados de razón por la Contraloría", dijo Molina, quien agregó que se impulsará una mesa de trabajo con funcionarios y la empresa concesionaria "para negociar algunos aspectos en los que yo no estoy de acuerdo.   No los vamos a dejar en un modelo en el cual nosotros no podamos trabajar los aspectos que para la salud y  los trabajadores son fundamentales".

El director del Servicio de Salud Oriente, Héctor Olguín, explicó que la concesión del recinto "afecta alrededor de 100 funcionarios de un total de dos mil. Tenemos cinco años para capacitarlos o trasladarlos a otros hospitales, asi que no es problema, ellos plantean un tema de ideología".

Olguín agregó que "hay un problema de desinformación sobre lo que se va a concesionar". Esto,porque de un total de 15 servicios no clínicos que hoy operan en el hospital, 10  ya están externalizados. Con el nuevo modelo, en tanto,  la cifra subirá a 14 (ver infografía).

Respecto de los efectos de la concesión, Villanueva respondió que "dicen que no va a afectar pero sí afecta. La externalización se ha planteado para allanar el camino a la concesión, pero lo que realmente genera es deuda", añade.