Nora Garay viajó por un día desde San Fernando, en la Región de O'Higgins, hacia Santiago porque tenía una hora al médico. De vuelta, "quería tomar el Metrotrén, pero recién supe que no funciona. Voy a tener que ir al terminal de buses, que es más caro", relata angustiada.

Como ella, cerca de 26 mil usuarios quedaron sin este medio de transporte debido al paro indefinido que realiza el sindicato de Maquinistas y Tracción de la Empresa de Ferrocarriles del Estado, que ayer sumó el apoyo de la Federación Nacional de Trabajadores Ferroviarios.
En total, son aproximadamente mil las personas que se encuentran movilizadas en el país.

"Nosotros queremos que la calidad del servicio hacia los usuarios sea la que corresponde", explica Marco Muñoz, presidente del sindicato.
El dirigente aseguró que de no haber soluciones a sus demandas de mayor seguridad en la vía no descartan radicalizar el movimiento, pues el paro "es responsabilidad de la empresa".

EL ORIGEN DEL CONFLICTO
Según los trabajadores, las fallas en el servicio se vienen repitiendo desde hace varias semanas y en las últimas dos ha habido 73.

"Lo que rebalsó el vaso", según señalan, fue un accidente en octubre en Lontué, por el que fue despedido un maquinista.

"La empresa, terminado el peritaje, señaló que la causa basal probable es la fatiga de material", dice Muñoz.

Sin embargo, según el gerente de operaciones de EFE, Raúl Etcheverry, el "trabajador no respetó un protocolo de movilización, por lo que fue desvinculado de la empresa".

Para los maquinistas, ni los trenes ni las líneas férreas son mantenidos de manera adecuada, por lo que existen posibilidades de que se origine un accidente.

Según Etcheverry, "EFE tiene una trayectoria respecto de la seguridad que en el pasado tenía buenos índices y eso se ha reforzado el último tiempo", dijo.

A esto agregó que ha habido problemas en las vías y lo adjudicó al robo de cobre de las líneas, que ha perjudicado el funcionamiento  de los trenes.