La sede del Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil en la ciudad de Jundiaí (estado de Sao Paulo) fue atacada hoy con bombas molotov, según denunció la bancada de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff.
El artefacto incendiario fue lanzado por desconocidos después de una manifestación que tuvo lugar en esta ciudad contra Rousseff, en el marco de las protestas que se celebraron este domingo en todo Brasil, según el PT.
La sede de Jundiaí sufrió "serios estragos" en una sala de la planta baja del inmueble, en la que se quemaron documentos, cortinas, mesas y sillas, según informó el partido, que publicó un vídeo de las dependencias después del incendio.
La Policía Militarizada de Sao Paulo y la Secretaría de Seguridad Pública regional, consultadas por la agencia Efe, no disponían de información sobre el supuesto ataque y no pudieron confirmar la información.
El concejal y líder del PT en la ciudad, Gerson Sartori, dijo que prefiere creer que el ataque fue "una acción de vándalos y no sea una acción orquestada por adversarios políticos".
El PT y la propia Rousseff fueron el blanco de las protestas pacíficas que se extendieron por todo Brasil y que congregaron a cerca de un millón de personas en la ciudad de Sao Paulo y a cientos de miles en otras ciudades.