Paul McCartney llegó con su esposa, Nancy Shevell, hasta el hotel Bevertly Hilton de Los Angeles, donde dejó flores en homenaje a la fallecida cantante Whitney Houston.

Así lo publica el portal TMZ, donde añaden que la pareja dejó en el lugar rosas amarillas, y que McCartney saludó a varios de los admiradores de la cantante que se encontraban en el lugar.

Según testigos, algunas personas habrían intentado felicitar a McCartney por su participación del domingo en la ceremonia de los Grammys, a lo que el británico habría respondido: "Esto se trata de Whitney, no de mi".