La Policía de Investigaciones (PDI) interpuso una querella contra quienes resulten responsables de la agresión contra dos oficiales y el robo del arma de servicio de uno de ellos, en medio de la marcha del 21 de mayo.
Los detectives fueron identificados como Stalin González y el subcomisario Sergio Calderón, siendo el primero de ellos al que le fue sustraída su arma de servicio. Ambos fueron trasladados al servicio de urgencia del hospital Van Buren.
De acuerdo a la policía, los funcionarios habrían sido confundidos con otro tipo de personas.