En los próximos días el fiscal de la zona metropolitana Centronorte, Nicolás Arrieta, solicitará extradiciones a Bolivia de ciudadanos chilenos y bolivianos que estarían implicados en el tráfico de 52 kilos de crack decomisados en Linares.
"Esta operación debiera culminar con las solicitudes de extradición de ciudadanos chilenos y bolivianos" aseguró Arrieta quien avaluó la droga en $300 millones.
Una investigación del Ministerio Público y la Brigada Antinarcóticos de la PDI terminó con la detención de Martín Choque y Javier Leiva, quienes transportaban la droga oculta al interior de un vehículo.
El fiscal explicó que la llamada "Operación Norte Grande" se inició en mayo pasado cuando se arrestó a seis personas y se incautó 86 kilos de cocaína.
"Presumimos que estaba destinada a ser procesada en algún laboratorio clandestino con el objeto de ser producida clorhidrato de cocaína o pasta base" dijo el fiscal a radio Cooperativa.