En 1966 el líder de los Beatles, John Lennon, visitó España durante seis semanas para filmar Cómo gané la guerra, una película de mensaje antibelicista, dirigida por Richard Lester.
Era un momento particularmente tenso para la banda de Liverpool, cuya separación, tan rumoreada por entonces, parecía estar a la vuelta de la esquina.
Lennon, desencantado con la fama y el futuro de la agrupación, barajaba la posibilidad de volverse actor y terminar de una vez por todas con sus días frente al cuarteto. No obstante, su estancia en Almería, lo inspiraron para seguir componiendo.
"Vivir es fácil con los ojos cerrados", dice la letra de Strawberry Fields Forever, canción que comenzó a escribir durante el rodaje.
La nueva película del español David Trueba, inspirada en un caso real, muestra a Antonio (Javier Cámara), un excéntrico profesor de inglés de la ciudad de Albacete -fanático de los Beatles- quien emprende un viaje, arriba de un destartalado Fiat, para conocer al ídolo inglés.
Ganadora de seis premios Goya -incluyendo los reconocimientos a Mejor película, Mejor guión original y Mejor Actor protagonista-, Vivir es fácil con los ojos cerrados será el título que esta noche de por inaugurado la 14° versión del Festival de Cine de Las Condes, a las 21.30, en el Rosedal del Parque Araucano. El encuentro es organizado por Fundación CorpArtes, la Municipalidad de Las Condes y La Tercera, y producido por la Corporación Cultural de Las Condes.
"Esta película nace de una crónica sobre los 40 años de la estancia de Lennon en Almería donde se contaba la peripecia de este profesor", contó en una entrevista el director madrileño de 45 años. "El hecho de ser periodista me ha ayudado a ver el cine de forma más crítica y con mayor contexto -explicó a un medio colombiano. No es malo que el cineasta también tenga un ojo puesto en la calle, en la realidad. Mis películas, casi siempre parten de anécdotas reales".
Conocido también por su inclinación hacia los hombres corrientes y los héroes anónimos, esta vez retrata a tres personajes entrañables, cuya candidez y ternura ha gustado a algunos y molestado a otros. Además del entusiasta profesor -quien enseña inglés a sus alumnos usando letras de los Beatles- se suman a la aventura una veinteañera y un adolescente en fuga, quienes coincidirán en el auto de Antonio, tras recogerlos en la ruta.
El profesor, conversador animoso y curioso por excelencia, a través de los días descubre los secretos de esas dos almas frágiles y algo dañadas. Mientras Belén (Natalia de Molina) huye de una casa de acogida a la que fue enviada por sus padres, tras conocerse que estaba embarazada; Juanjo (Francesc Colomer), movido por un ímpetu rebelde, escapa de la severidad y conservadurismo de su padre. Los tres, a pesar del poco tiempo que están juntos y sus difíciles circunstancias personales, establecen un lazo poderoso y de autentica amistad.
"Antonio es un llanero solitario que en vez de ir a caballo va en su coche, que llega a un sitio con la intención de hacer el bien y de ayudar a los demás. Y, al final, se queda solo", afirmó el realizador sobre el personaje, quien tras llegar a la árida Almería, junto a sus jóvenes compañeros de viaje, se ve obligado a hacer las mil y un peripecias para poder llegar hasta el inalcanzable Lennon.
Destacada entre la crítica por su logrado retrato de época y tono optimista, el diario El País se refirió a ella como una "Película luminosa y cargada de carisma, excéntrica mezcla de road movie y western errante". En tanto, otro medio español la valoró por "reunir en una idea dos conceptos imposibles: memoria e historia".