El entrenador del Málaga, el chileno Manuel Pellegrini, espera que el partido de la última jornada de la Liga que va a enfrentar a su equipo con Barcelona, en La Rosaleda, se convierta "en una fiesta" para celebrar la permanencia que rubricó el equipo andaluz con su empate de ayer en San Mamés ante Athletic de Bilbao.

"La Rosaleda ha sido una fiesta todo el año, hemos sentido el apoyo permanente de la afición y, en este partido, les vamos a dedicar la permanencia, porque se lo merecen", destacó Pellegrini antes de valorar de manera "muy positiva" el éxito certificado en Bilbao.

"Al equipo le costó entrar en funcionamiento, pero en la segunda vuelta hemos conseguido una cantidad de puntos muy importante y terminamos jugando a un gran nivel. El equipo sale a jugar como me gusta en todas las canchas y hoy, por ejemplo, me ha gustado mucho en la primera parte a pesar de las bajas", explicó.

Acerca del choque frente al Athletic, el técnico chileno manifestó que la expulsión del argentino Martín Demichelis "condicionó" un partido "muy bueno" por parte de su equipo hasta entonces.

Por último, y acerca de los dos penaltis casi consecutivos decretados por Muñiz Fernández en contra de su equipo, Pellegrini reconoció que el colegiado asturiano "acertó en los dos" y por ello "hay que felicitarle".