La fiesta estaba anunciada. El próximo 12 de mayo se celebrarán los 50 años de la creación de editorial Alfaguara. Y para festejar se reunirán, en Madrid, tres estrellas de su catálogo: el premio Nobel peruano Mario Vargas Llosa y los españoles Javier Marías y Arturo Pérez-Reverte. Es más, hoy se entrega el XVII Premio Alfaguara de Novela, pero nada más se sabía de un rumor que daba vueltas hace por lo menos un año.

Eso, hasta ayer. Y ocurrió: el grupo editorial Penguin Random House Mondadori compró Ediciones Generales, que incluye a Alfaguara, a Santillana. La transacción  alcanzó los 100,3 millones de dólares.

La compra es la más grande establecida en el mercado Hispanoamericano. Y si se le suma el antecedente del año pasado cuando Random House adquirió la editorial británica Penguin, el rumbo de la literatura está desde ayer en manos del Grupo Penguin Random House.

"La nueva empresa editorial prevé publicar 1.500 títulos anuales", señala el comunicado enviado desde Penguin Random House, cuyo catálogo crecerá considerablemente. Si Random House tiene en sus filas a Isabel Allende, Gabriel García Márquez, J. M. Coetzee y E.L. James (autora de Cincuenta sombras de Grey), ahora sumará al premio Nobel Mario Vargas Llosa, la obra de Julio Cortázar, a los españoles Javier Marías, Arturo Pérez-Reverte, el irlandés John Banville, los latinoamericanos Juan Gabriel Vázquez, Alberto Fuguet, Santiago Roncagliolo y Edmundo Paz Soldán, entre muchos más.

Ayer, la compra de Ediciones Generales (Alfaguara, Aguilar, Taurus etc.)  fue comentario obligado en la prensa y redes sociales. "Estas piedras sonaban en el río desde hace bastante tiempo", anotó en su cuenta de Twitter el autor peruano Iván Thays, refiriéndose a la transacción.

"Lo único importante para los lectores son los buenos libros, no los accionistas", anotó en Twitter Guillermo Schavelzon, agente literario que representa a autores chilenos de Alfaguara como Hernán Rivera Letelier, Pablo Simonetti, Marcela Serrano y Carla Guelfenbein. "Ojalá en Random se porten bien con los escritores igual como se portaba Alfaguara con nosotros", dice en broma y en serio Rivera Letelier ante la noticia.

Sobre el movimiento de escritores desde Alfaguara a Penguin Random House, Matías Rivas, editor de Ediciones UDP, dice: "Estas empresas están manejadas por gente  inteligente y seguramente van respetar las líneas de cada sello".

La adquisición incluye, de Santillana, a Ediciones Generales: Alfaguara, Aguilar, Punto de Lectura, Suma de Letras y Taurus, con presencia en España, Portugal, Brasil  e Hispanoamérica.

Santillana, empresa perteneciente al Grupo Prisa, no se desprendió de su catálogo educativo: Infantil y Juvenil. Esto, ya que en 2013 aportó a la compañía el 87% de sus ingresos.

"Estos son tiempos que exigen poner todo el foco y esfuerzo en la actividad que desde los orígenes de la compañía mejor define su core business, y que es la educativa", señaló Miguel Angel Cayuela, Consejero Delegado de Santillana.

"El grupo Penguin Random House va a tener un crecimiento y un peso dentro de la industria editorial latinoamericana, pero nunca como para tener un predominio de carácter monopólico", dice Pablo Dittborn, ex director de Random House Chile.

Sin embargo, tras la transacción de ayer el mapa editorial cambió y se focaliza en dos grupos: Penguin Random House mantiene los sellos Debate, Grijalbo, Plaza&Janés, Lumen, Montena, Caballo de Troya, y ahora Alfaguara y sus respectivos sellos. El otro grupo es Planeta, que reúne a Seix Barral, Emecé, Paidós, Noguer, y ahora distribuye el sello Tusquets.

Ante el posible duopolio,  "A quien podría afectarles es a los libreros, quienes tendrán un proveedor con una cifra importante de las ventas en su poder, pero no veo un gran terremoto", señala Arturo Infante, presidente de la Cámara Chilena del Libro. Al parecer, la celebración de los 50 años de Alfaguara, en mayo próximo, deberá tener más sillas para los nuevos comensales.