Usted prevé una votación cercana a los 6.400.000 votos válidamente emitidos, levemente superior a la votación de 2013. ¿Por qué?
Esta va a ser una elección más competitiva. Las elecciones más competitivas son las que movilizan más electores, las elecciones más participativas de la historia de Chile son el plebiscito y la segunda vuelta Lagos-Lavín. Producto de que hace diferencia para el votante quedarse en la casa o concurrir a la elección, a la urna. En la elección pasada, en la presidencial, ya se sabía el resultado y la segunda vuelta Bachelet-Matthei fue la elección con menor participación histórica (5.582.279 de votos), porque tenía cero nivel de incertidumbre. Esta, en cambio, tiene un mayor nivel de incertidumbre respecto de quiénes pasan a segunda vuelta, hay un nuevo sistema electoral que hace muy competitiva la elección parlamentaria. Tengo la impresión de que habrá un pequeño sobresalto respecto de los votos válidos de la elección del 2013.
Según su pronóstico, no habrá mayoría de ningún bloque en la Cámara. ¿Será más difícil gobernar?
Se rompe el binominal, se rompe el empate. Se configura una tercera fuerza significativa y, además, entran otros actores, y eso hace que las fuerzas que no sacan más de la mitad de los votos no tengan más de la mitad de los parlamentarios. Es así de sencillo. Antes, con menos de la mitad de los votos, con 45%, podías tener más de la mitad del Congreso, y ahora no. En el fondo, lo que yo estoy diciendo es que Chile Vamos va a sacar un número similar que los diputados de la DC más los partidos que respaldan a Guillier y que habrá unos 15 diputados que no están alineados en esos dos grandes bloques. La geometría de los acuerdos en la Cámara va a ser compleja.
¿Será la DC el partido más perjudicado del oficialismo en las próximas elecciones?
La DC va sola, entonces mucha de su votación va a caer en el vacío, porque no van a alcanzar a dar el mínimo necesario para elegir un diputado en muchos distritos. El PS, con poco más de 10%, va a sacar bastantes más diputados que la DC, con más de 11%, y eso se explica por la decisión de haber concurrido solos a la elección, de llegar al 19 de noviembre con un candidato propio. Ese va a ser el costo finalmente, porque la DC con los mismos votos podría haber elegido significativamente más diputados. Esta es la primera elección de este nuevo sistema. Es una oportunidad en que se rebarajaba el naipe. El 19 de noviembre el tamaño que obtengan las fuerzas políticas los acompañará durante el próximo ciclo de la política chilena. El que creció va a seguir creciendo y el que empequeñeció va a seguir empequeñeciendo.
El PPD y el PS no crecen ¿Se estancan?
El tema del fin del binominal y el sistema electoral proporcional van a ir presionando para que partidos con misma identidad tiendan a constituirse como uno solo. El sistema binominal hacía que el PPD existiera donde el PS no existía, y que el PS existiera donde el PPD no existía. En cambio, ahora todos compiten con todos y, en consecuencia, la conclusión que vendrá es mejor juntémonos y así ocupamos un espacio mayor y tendremos una mayor elegibilidad. Veo que el espacio de centroizquierda laico va a terminar, ya sea en una forma federativa, o ya sea en un partido socialista democrático o socialdemócrata más grande, más incidente. Las fuerzas que apoyaron a Guillier van a tener más de 50 diputados, 54 en la apuesta que estoy haciendo, pero si de todas maneras actúan unidas, se constituyen en la principal fuerza.
Usted plantea que habrá partidos que no alcanzarán los mínimos para seguir subsistiendo... En el Frente Amplio usted le vaticina vida sólo a RD y el PH...
Apostaría a que eso va a ocurrir. Salvo en esos dos casos. Desde mi punto de vista es sano, porque la proliferación de partidos está bien para que compitan. Cuando discutimos la ley yo dije 'no soy partidario de poner un umbral para competir, soy partidario de poner el umbral para subsistir después de haber competido'. Si después de haber competido uno no tiene adhesión popular, no es razonable que sigas existiendo legalmente, que te sigan financiando estatalmente. Va a llegar la hora de la verdad para muchos partidos. ¿Será real el PRI? ¿Expresará una corriente de opinión y una votación de más del 3% nacional? Yo apuesto a que no. Lo del PRI podría repetirlo con varios otros partidos que seguramente van a perder su condición de tales. Y para reinscribirse van a tener que hacerlo con personas ante notario y no simplemente heredando firmas.
