Un pequeño café en pleno paseo Bulnes fue el escenario escogido por el comando de Alejandro Guillier para el encuentro público entre el abanderado oficialista y el ex presidente uruguayo, Pepe Mujica.
Mujica llegó ayer a Chile para participar del cierre de campaña del senador en Valparaíso. Durante esta mañana en tanto, se reunió con la ex abanderada del Frente Amplio, Beatriz Sánchez, para luego encontrarse nuevamente con el legislador por Antofagasta.
"Mis felicitaciones al pueblo chileno. Muy probablemente ustedes no son conscientes de que se dan el lujo de tener una elección entre dos ciudadanos calificados, muy distinto cada cual con su carro de ideas, pero valiosos. Y eso no es poca cosa en el mundo de hoy", expresó Mujica en conversación con la prensa.
"Conocí al señor Piñera y tuve la mejor relación como latinoamericano y como vecino. Mi corazón, mi manera de pensar, está siempre con el campo progresista. Mis sueños trabajan para un mundo que yo no veré, y ese mundo es que los latinoamericanos vayan construyendo su nación. Hemos construido varios países, nos falta un alero común que nos pueda defender a los débiles en el mundo que va a venir que va a ser continental", acotó.
En esta línea, el ex mandatario de Uruguay hizo un llamado a la unidad a los sectores políticos. "Cuiden la convivencia, aprendan a tolerarse, luchen por tolerarse. Nada es perfecto. Lo que viene no es ni el paraíso ni el infierno, es la escalera de la vida por la que hay que luchar para subir escalones de a poquito".
"Yo apoyo todo lo progresista en el mundo, tengo una inclinación filosófica, porque me gasté la vida luchando por el reparto, he gastado mi vida tratando de contribuir a tener un mundo más de iguales", indicó. "Espero que por parentezco en materia de sentir y de pensar estoy acá. Pero no estoy por ser enemigo de fulano o de mengano, no soy enemigo de nadie".
"Mi interpretación de la historia es que siempre ha existido una cara conversadora de la historia y una cara de cambio. Como somos petulantes los hombres decimos izquierda y derecha (...) pero nos precisamos mutuamente, la historia humana es un vaivén permanente".
Mujica precisó que "yo pertenezco a esa cara de cambio de la historia soñando permanentemente con la igualdad. Todos tenemos errores. La cara conservadora cuando se pone muy dura se transforma en fascistoide, que no es lo mismo conservador que fascista. La cara mía cuando se llena de corazón y de buenas intenciones en demasía, se pone a querer repartir lo que no existe y cae en el infantilismo, y confunde realidad con sentimiento y va más adelante de lo que se puede".
"Si los dejamos solos, de tan conservador se tragan todo y no reparten nada y al sociedad se nos hace inhabitable. Y si a nosotros nos dejan repartir a muerte demasiado tal vez quedamos hundidos. Entonces nos precisamos mutuamente. Seamos adversarios no enemigos", aseveró.
Sobre la relación entre la Nueva Mayoría y el Frente Amplio, el ex jefe de Estado manifestó que "recuerden que Hitler llegó al poder porque los de izquierda se mataban entre ellos en vez de pelear contra Hitler".
"El eterno problema de la cara progresista es la unidad, y el eterno peligro y el eterno flagelo. Por eso quiéranse un poco más y sepan lo que está en juego. El tiempo lo dirá", agregó. "Yo pertenezco a alianza que tiene más de 40 años, que nos peleamos todos los días pero mantenemos el cuadro. Si el cuadro lo rompemos sonamos como arpa vieja, pero el cuadro junto nos permite ir avanzando y algo hemos logrado".
