Mientras en Costa do Sauípe se definía la suerte de Chile en el sorteo de Brasil 2014, en Santiago, a dos años del Mundial Sub 17 de Chile, la competencia ya comienza a tomar forma. Esta semana culminó la primera visita de la delegación que inspeccionó los posibles recintos de la cita, que se desarrollará entre el 17 de octubre y el 8 de noviembre de 2015. Talca, Chillán, La Serena, Coquimbo, Puerto Montt, Viña del Mar y Quillota fueron parte de este recorrido.

El grupo, encabezado por Iñaki Alvarez, director de competiciones de la FIFA, observó instalaciones y evaluó lugares de entrenamiento y hospedaje. El resultado fue satisfactorio. "He venido varias veces y me he sentido muy cómodo, el país es muy bonito, la gente es muy amable y cariñosa. Es fácil trabajar aquí, son muy profesionales", afirma el español, quien también estuvo en el Mundial femenino Sub 20 de 2008.

Sobre aquel evento, guarda el mejor de los recuerdos. "Fue un éxito. Antes de eso, no había fútbol femenino en Chile. La gente participó y hubo una celebración familiar en los estadios.  Esta también va a ser una gran experiencia y creo que será mayor que la de 2008. Va a ser el evento de fútbol más grande de la historia de Chile: 24 equipos, 52 partidos, 23 días... En sentido logístico, es el más grande", comenta.

Entre las cosas que más impresionaron al ejecutivo, están el recibimiento y el compromiso social de las ciudades. "Todos nos recibieron muy bien. Hubo alcaldes, senadores, intendentes... medios de comunicación. No hubo mucha diferencia entre una ciudad y otra. Coquimbo y Chillán las conozco muy bien. Como ciudad, Viña es muy turística, al igual que Coquimbo, mientras que Puerto Montt tiene mucho potencial: se puede ver el canal Tenglo desde el estadio y tiene un (chancho) Lorenzo, que le da mucho carácter. Va a ser una elección difícil. Todos hablaron de llevar el fútbol a la población construyendo complejos para darle oportunidades a la gente para que haga deporte", afirma.

Un público con pasión

Alvarez estuvo a cargo del Mundial Sub 20 de Turquía, una cita en la que el poco público en los estadios fue un problema insalvable.

"Lo que pasó ahí no puede volver a pasar. Fue una lástima, una oportunidad perdida. Hay tiempo para hacerlo bien. Va a ser distinto, tiene que ser distinto, porque Chile tiene mucha historia y tradición en fútbol, la gente tiene mucha pasión, y ahí hay una gran diferencia con otros países", sostiene.

Asimismo, destaca que "el apoyo en el país es muy fuerte. Además, seguramente, vamos a tener equipos muy buenos y grandes jugadores. Tendremos todos los ingredientes para llenar los estadios. De hecho, nuestra primera misión es esa. Y si los estadios están llenos, será un indicador de que el trabajo estuvo bien hecho desde el principio".

Incluso, Alvarez no duda en proyectar al país en la organización de un evento mayor, como un Mundial adulto. "Chile tiene todas las condiciones para organizarlo, pero primero hay que terminar este", apunta.

Sobre las expectativas que tiene cifradas en la Copa del Mundo de 2015 es claro: "Este Mundial va a ser muy especial, a la manera de Chile. Este tiene que ser un Mundial del país, que refleje su carácter e idiosincrasia", asegura.

La inversión contemplada para el evento bordeará los US$ 11 millones. En tanto, las sedes definitivas serán escogidas en febrero, en una reunión que se celebrará en Zurich.