El diseñador británico Peter Copping, hizo su debut en la casa de París de Nina Ricci en la noche de ayer con una femenina colección Primavera-Verano 2010 compuesta por una paleta de colores que incluía el rosa, el amarillo limón, el champaña, los colores pasteles, sin dejar de lado el negro para los vestidos de noche.
Flores, vuelos, lazos y encajes; todos los símbolos de la feminidad y la coquetería formaron parte de esta encantadora colección.
Copping se atrevió con el cuero, las polleras lápiz, las faldas en capas adornadas con gasa, y algunos vestidos y tops transparentes que dejan ver floreados sostenes.
Medias y leggins a tono se asomaban por debajo de los las faldas y vestidos. Sin dudas el modelo más destacado fue un vestido strapless lleno de vuelos de gasa y seda en blanco y amarillo limón.
Agregó pequeños delantales de encajes a distintas polleras o pantalones, y los cortes eran suaves, redondos y armónicos.
El británico demostró que también se sentía cómodo usando una paleta más oscura, con una serie de vestidos asimétricos en azul oscuro y negro, con toques en encaje, satén y seda. Sin embargo, fue capaz de mantener el estilo romántico de la colección con apliques de flores, lazos y vuelos.
Copping, quien reemplazó al diseñador belga, Olivier Theyskens, en abril, nació en Oxford, y es un graduado de Central Saint Martins y el Royal College of Art de Londres. Anteriormente fue jefe de diseño de Marc Jacobs en Louis Vuitton por 12 años, y después trabajó tres años con Sonia Rykiel.
"Mi corazón está con la moda francesa", aseguró al diario británico Telegraph. "Y esta es una casa muy francesa".
Nina Ricci, que nació en Italia, pero se trasladó a Francia siendo sólo una niña, era una costurera que trabajó durante muchos años en talleres de París, antes de fundar su propia casa en 1932 a la edad de 50, con su hijo Robert.
Aunque, en los últimos años, la identidad de la casa de moda se había desvanecido, su perfume más famoso, L'Air du Temps, permanece en el top 20 francés.