El presidente de Bolivia, Evo Morales, participó hoy en la inauguración de la perforación de un pozo petrolero en el oriente del país, en el que la compañía estatal YPFB y la hispano-argentina Repsol YF invertirán US$55 millones.

La operación supone la reactivación después de 15 años de la exploración petrolera en la zona de Camiri, que antes era conocida como la capital petrolera del país, informó la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).

El pozo Saradenda X-1, en el campo Guairuy del departamento de Santa Cruz (este), contará con la inversión a partes iguales de YPFB y YPFB-Andina, en la que Repsol participa a su vez con cerca del 50%.

Según los primeros estudios, este pozo puede tener reservas por 1,2 billones de pies cúbicos de gas y 34 millones de barriles de condensado.

En su discurso el presidente Morales reconoció que, si bien Bolivia tiene buenos resultados en cuanto a gas, está "mal en el tema de petróleo", por lo que instó a invertir para aumentar el número de perforaciones en el país con ese propósito.

Morales sostuvo que la reactivación de ese pozo lo alienta y que espera que este tipo de trabajo continúe en Bolivia.

Para el mandatario, la tarea más importante en el sector es dar prioridad al petróleo y los líquidos, porque "Bolivia no puede seguir importando diesel o gasolina".

Según un informe oficial, a septiembre de este año, Bolivia produjo más de 45.000 barriles de hidrocarburos líquidos por día, lo que no basta para cubrir el mercado interno.

En cambio la producción de gas abastece el mercado local, además de cubrir la demanda de Argentina y Brasil.

Las reservas probadas de gas de Bolivia rondan los 8,3 billones de pies cúbicos, un tercio de lo que inicialmente se creía, según el informe de una empresa certificadora de EE.UU. que ha sido difundido extraoficialmente y que YPFB ha pedido revisar.