En Damasco, la capital Siria, a los pasajeros del vuelo 562 de Air France se les pidió que sacaran sus billeteras para que ayudaran a pagar por el combustible adicional que significó el desvío.
El avión, que se dirigía de París a la capital del Líbano, tuvo que ser desviado en medio de tensiones cerca del aeropuerto de Beirut el miércoles. Con poco combustible, terminó por aterrizar en Damasco, la capital de la vecina Siria, donde una guerra civil hace estragos.
Un vocero de Air France explicó hoy que la tripulación le pidió a los pasajeros dinero en efectivo sólo como una "medida de precaución", debido a "circunstancias muy inusuales". Las sanciones que pesan sobre Siria complicaban el pago de combustible adicional.
Dijo que Air France encontró una manera de pagar por el combustible sin necesidad de acudir finalmente a los pasajeros y se disculpó por las molestias. La compañía aérea nunca había recurrido a dicha solicitud, indicó.
El avión despegó tras pasar la noche en Chipre y después aterrizó en Beirut el jueves, con todos sanos y salvos.
Líbano es una mezcla volátil de facciones a favor y en contra de Siria. Una serie de toma de rehenes ha suscitado preocupaciones de que el país se vea arrastrado por la guerra vecina. Las turbas que apoyan al presidente sirio Bashar Assad bloquearon el miércoles la autopista principal que lleva al aeropuerto de Beirut, antes de que las unidades militares libanesas resolvieran la situación.
