La Fiscalía Metropolitana Oriente presentó hoy oficialmente  la acusación judicial por la investigación del crimen del ingeniero Diego Schmidt-Hebbel, como también el doble homicidio del arquitecto Francisco Zamorano, y su pareja Héctor Arévalo.

Hasta el 8° Juzgado de Garantía de Santiago llegó el fiscal Carlos Gajardo quien ingresó el escrito con los antecedentes del caso, recopilados durante 10 meses de investigación, y en el que se solicitan 83 años de cárcel contra María del Pilar Pérez,  la autora instigadora de los homicidios.

Se trata de dos penas de 40 años de cárcel por el doble homicidio de calle Infante y otra pena similar por el robo con homicidio de Diego Schmidt- Hebbel y el intento frustrado por terminar con la vida de la familia de la novia del joven . A ello se suman otros 3 años y un día de presidio por el intento de asesinato de la esposa de uno de los hijos de la mujer.

Para José Ruz, en tanto, la fiscalía solicitó  dos presidios perpetuo calificado en que se mencionan como agravantes el actuar bajo promesa y la alevosía.

El fiscal Gajardo justificó la pretensión punitiva asegurando que se trata de  " penas que están actualmente en nuestra legislación, se trata de delitos graves y que contemplan penas duras en el código penal".

Por su parte, el defensor de la mujer, Mario Palma, dijo que "creemos que no hay ningún antecedente potente, sumamete fuerte para demostrar que mi representada tiene participación en los hechos que se le están vinculando".

Según la investigación fiscal, la mañana del 4 noviembre pasado, el sicario José Ruz Rodríguez asesinó de un disparo a Diego Schmidt- Hebbel (25) en el domicilio de su polola ubicado en calle seminario 97, de Providencia.  Pilar Pérez habría ofrecido dinero a Ruz para perpetrar un robo en el inmueble y terminar con la vida de Agustín Molina, suegro de la víctima.

La mujer también está acusada por haber encomendado el crimen de su ex marido Francisco Zamorano y su pareja Héctor Arévalo, ocurrido el 24 de abril de 2008, en calle Infante de Providencia.

En agosto pasado, la fiscalía sumó un nuevo y revelador antecedente al caso. En la audiencia de reformalización de los imputados el fiscal Carlos Gajardo relató que tras el disparo que mató al joven economista, el sicario José Mario Ruz, le propinó además una puñalada al lado izquierdo del cuello.

Según el Ministerio Público, este  antecedente demuestra que el asesinato fue premeditado y  echa por tierra la versión de Ruz en cuanto a que se le escapó un tiro mientras forcejeaba con su víctima.