Los pilotos del avión de Asiana Airlines que se accidentó el sábado en San Francisco intentaron a último momento abortar el aterrizaje y buscaron aumentar la velocidad antes del impacto para subir y hacer un nuevo intento, según revelaron hoy las autoridades que investigan el incidente, que dejó dos muertos.
La información fue obtenida en un análisis preliminar de los datos del vuelo y de las grabaciones de la tripulación obtenidos de los restos del avión, que se incendió tras un aterrizaje de emergencia, indicó Deborah Hersman, presidenta de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés).
Hersman no quiso hablar de un error del piloto como causa del accidente y dijo que su equipo sólo está en el segundo día de investigaciones tras el accidente ocurrido el sábado después de que el avión aterrizara en San Francisco proveniente de Seúl.
Decenas de personas resultaron heridas, pero 305 sobrevivieron al aterrizaje forzoso y el incendio que estalló a continuación, que destrozó gran parte del avión.
"Esto podría haber sido mucho peor", dijo el alcalde de San Francisco, Ed Lee, en una conferencia de prensa. "Tenemos suerte de haber tenido tantos sobrevivientes. Pero aún hay bastantes heridos y nuestras plegarias y pensamientos son para ellos", indicó.
En las grabaciones se escucha a uno de los miembros de la tripulación que, siete segundos antes del impacto, pide que se acelere la velocidad, que había caído por debajo de los 137 nudos (253 kilómetros por hora), la velocidad de aproximación de los aviones.
"La velocidad estaba significativamente por debajo de los 137 nudos", dijo Hersman. "Y no estamos hablando de unos pocos nudos".
Unos cuatro segundos antes del impacto se escucha el sonido de una alarma que advierte que el avión estaba a punto de entrar en pérdida. Los motores aparentemente respondieron de manera "normal" al intento de recuperar la velocidad, pero 1,5 segundos antes de chocar, la tripulación considera abortar el aterrizaje y volver a subir para intentar una nueva maniobra de aterrizaje, reveló Hersman.
La jefa de la NTSB dijo que las dos horas de grabaciones de audio de la cabina indican que la maniobra de aproximación al aeropuerto transcurría "normalmente".
Investigadores surcoreanos, donde tiene su sede Asiana, llegaron a San Francisco y fueron incorporados al equipo de la NSTB, apuntó Hersman.
El jefe ejecutivo de Asiana, Yoon Young Doo, dijo este domingo que el Boeing 777 ER, construido para vuelos intercontinentales largos, no tenía problemas estructurales. El avión había sido construido en 2006.
"Entendemos que no había problemas de motores o mecánicos", aseguró Yoon.
Las dos víctimas del accidente eran dos adolescentes chinas de 16 años, informó la CNN. Las jóvenes estaban sentadas en la parte trasera del avión y murieron después de que la cola se separara del resto del aparato. Los cuerpos de las mujeres fueron hallados en la pista de aterrizaje.
La mayoría de los pasajeros logró salir rápidamente del avión a través de las rampas de emergencia. En pocos minutos el fuselaje se había prendido fuego.
El Buró Federal de Investigaciones (FBI) descartó que se tratara de un ataque terrorista.
Asiana informó que a bordo había 291 pasajeros, de los cuales 141 eran chinos, 77 coreanos y 61 estadounidenses, además de los 16 miembros de la tripulación.
Las dos víctimas del vuelo 214 fueron las primeras en los casi 20 años de historia del Boeing 777.