En el marco de su asistencia a la cumbre de Celac realizada hoy en Cuba, el Presidente Sebastián Piñera y la mandataria electa, Michelle Bachelet, expusieron ante el pleno de gobernantes y jefes de Estado que forman parte de la instancia internacional.

En esa línea, el Presidente Piñera destacó el trabajo conjunto realizado, en pos de avanzar en los desafíos que el siglo XXI representa para la región, así como también hizo hincapié en que ésta será la última ocasiónn en que participa, en calidad de jefe de La Moneda.

"Esta es la última oportunidad que, como Presidente de Chile, participo en la cumbre de la Celac, la próxima vez, en San José de Costa Rica, le corresponderá a la Presidenta electa, Michelle Bachelet, que hoy día nos acompaña, quien asumirá el mandato por cuatro años, desde el día 11 de marzo", aseveró.

A la vez, el mandatario chileno agradeció a su par cubano por la organización de la cumbre, y realizó una reflexión sobre América Latina, el Caribe y sus relaciones y vicisitudes.

Piñera expuso que "hace ya dos siglos, nuestro continente era más próspero, o si ustedes quieren, menos pobre, pero lo cierto es que lejos de haber aprovechado en plenitud todas esas oportunidades que la libertad y la independencia, y las condiciones naturales de nuestra región, poco a poco, nuestro continente empezó a perder terreno frente a otros lugares del mundo." 

"En esta pérdida de terreno se fueron bifurcando nuestros destinos, con respecto a aquellos que encontraron el camino hacia el desarrollo, y que hoy día constituyen lo que se llama el 'primer mundo'", argumentó.

Piñera recalcó la necesidad de trabajar sumando esfuerzos, en vistas que "somos todavía un continente subdesarrollado en que casi uno de cada tres de nuestros compatriotas - y en su mayoría niños- vivimos todavía en condiciones de pobreza".

Tras su intervención, cedió la palabra a Michelle Bachelet, quien también profundizó en las palabras del actual  mandatario chileno, y reforzó el llamado a trabajar en conjunto a los países de América Latina y el Caribe.

"Quiero agradecer al Presidente Piñera a que lo acompañe aquí, hoy día, con ustedes, porque además ha sido una tradición que hemos establecido, que los Presidentes entrantes son invitados por el Presidente saliente, y creo que es una muy buen tradición. Creo que un instrumento como Celac tiene que permitir lo que muchos de ustedes han señalado: poder unir esfuerzos, sabidurías, recursos y voluntad política para enfrentar los problemas que tenemos", dijo.

La próxima Presidenta cito, entre otros, "la erradicación de la pobreza, del hambre,  pero quisiera añadir la desigualdad en todas sus caras".

<strong>"Quiero decirles: me espera un tremendo desafío, porque como todo nuevo Presidente electo, la gente tiene tremendas expectativas. Y creo que la región también tiene tremendas expectativas en un instrumento como Celac". </strong>

Añadió que "eso nos obliga a trabajar con fuerza para transformar nuestras resoluciones, planes de acción y buena voluntad, en avances concretos, que permitan hacer lo que ellos esperan de nosotros: poder  tener una vida más justa, de mayor respeto, de mayor dignidad, que todos nos merecemos".

"Sin duda que nuestra gente es el mayor capital que tiene cada uno de nuestros países y nuestra región. Soy una convencida que, si en algo vale la pena a la Presidencia de la República es para trabajar, agrandar, ampliar, los derechos y oportunidades de nuestra gente".

Al mismo tiempo, expresó que aprovechaba la oportunidad para "ratificar mi compromiso con este instrumento, con América Latina y el Caribe".

"Mi compromiso, desde cuando sea Presidenta, a trabajar a contar del 11 de marzo con todos ustedes, para trabajar por los sueños y anhelos de la gente, y a la vez, cuando tengamos que definir esa agenda de desarrollo de 1015, podamos hacerlo de una manera conjunta y poner en el centro de la discusión a la humanidad, las personas", finalizó.