La foto del fundador del movimiento islamófobo alemán Pegida en la que aparece posando con el peinado y el bigote típicos del dictador nazi, Adolf Hitler, incrementó la discusión en torno a la orientación del grupo.

La portavoz de Pegida, Kathrin Oertel, aseguró al diario alemán Bild que la foto publicada en la red social con la leyenda Facebook era "una broma".

El propio Bachmann dijo al diario que se tomó la foto en la peluquería por la aparición del libro "Er ist wieder da" ("Ha vuelto"), una novela satírica sobre Hitler. "De vez en cuando hay que tomarse en broma a uno mismo".

Las explicaciones no impidieron que la impactante foto se difundiera rápidamente por las redes sociales desde la noche del martes acompañada por críticas y comentarios sobre "la verdadera cara" de Pegida.

El polémico grupo viene sacando a miles de personas a la calle cada lunes en la ciudad de Dresde en reclamo de políticas más duras de inmigración y asilo y contra la supuesta islamización de occidente.

Pegida niega ser racista y xenófobo, pero en sus marchas se combinan ciudadanos corrientes desencantados con elementos neonazis y de ultraderecha.

Bachmann se encuentra actualmente bajo protección policial después de recibir amenazas de muerte. Las fuerzas de seguridad prohibieron además la marcha del lunes en Dresde por "amenazas concretas" de que se perpetrara un atentado islamista.

Tras la cancelación, Pegida convocó hoy una gran manifestación en la cercana Leipzig. La policía espera que hasta 100.000 personas participen en la marcha islamófoba y en las contra-manifestaciones a favor de una sociedad abierta y tolerante.