Pocas horas después de que las autoridades del estado de Massachusetts, Boston y el vicepresidente estadounidense, Joe Biden, realizaran ofrendas en la zona durante la conmemoración del atentado en el maratón de Boston que dejó tres personas fallecidas y más de 260 heridos hace un año, la incertidumbre volvió a tomarse la ciudad estadounidense.

Dos mochilas fueron abandonadas en el sector de la meta del maratón, que este año tendrá lugar el próximo lunes, lo que generó un gran operativo.

La policía de Bostón evacuó el sector, en la calle Boylston, y luego un robot fue enviado a inspeccionar las mochilas.

Tras varias horas, las unidades especiales decidieron detonar ambos bolsos por precaución. Las explosiones se produjeron con media hora de diferencia y causaron temor en algunos transeúntes.

Antes, la policía detuvo a una persona que sería la que habría abandonado las mochilas en la meta del maratón.