A las 7.00 horas del martes, la policía española realizó la detención de cinco personas, quienes serían parte de una red que reclutaba personas para sumarlas a las filas del grupo terrorista Estado Islámico (EI).

Entre éstas se encontraba la ciudadana chilena Francis Peña Orellana (25), quien nació en la V Región y que desde los 16 años se encontraba residiendo en España. La mujer, que fue detenida en el entresuelo de un edificio ubicado en Barcelona, se habría acercado a esta corriente influenciada por el padre de su hijo, un hombre de origen marroquí. De hecho, en ese país fueron detenidos dos hombres que también tienen relación con esta célula.

Ayer, los detectives de la PDI de Interpol Santiago recibieron información de la policía española, en que les indicaron que ahora las pericias apuntarán a analizar los correos electrónicos y las llamadas por teléfonos celulares que realizaron los integrantes de la red, incluida la ciudadana chilena.

Asimismo, también se indicó que por este operativo la policía española realizó siete allanamientos en las localidades de Barcelona, Ceuta y Melilla, en los que se levantó material escrito e informático, el que se sumará a la investigación.

En estas diligencias, además, se incautó documentación yihadista que pertenecería a esta agrupación.

Según han establecido las autoridades españolas, la red se dedicaba a captar mujeres jóvenes, especialmente vía redes sociales, para convencerlas de unirse al Estado Islámico y luego realizar las coordinaciones para enviarlas a las zonas del conflicto, en Siria e Irak.

Según detalló el sitio web del Ministerio del Interior de España, "a través de redes sociales como Facebook, las reclutadoras activas insertaban mensajes y propaganda en las que insistían en la 'supuesta crisis de valores existente en la sociedad occidental actual' y que sólo puede ser compensada a través de la interpretación extrema de los valores del Islam".

Se ha detectado que la agrupación ya había captado a 12 mujeres. Hasta la tarde de ayer, los detenidos se encontraban en dependencias policiales y se espera que hoy queden a disposición del juez Santiago Pedraz, titular del Juzgado Central de Instrucción número uno, de la Audiencia Nacional.

Trascendió que los detenidos se encontrarían incomunicados, en una cárcel de alta seguridad, y que la declaración ante el juez Pedraz podría durar hasta dos días. En tanto, la menor de 17 años que fue detenida junto a la agrupación quedó a disposición de la Fiscalía de Menores de Melilla, a petición de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.

La mañana de ayer, el subsecretario de Interior, Mahmud Aleuy, indicó en TVN que no existían antecedentes de más chilenos que estuvieran involucrados a este grupo extremista.