El policía blanco que  mató a un desarmado joven afroestadounidense en agosto pasado en la ciudad de  Ferguson y que no fue inculpado por la justicia dijo este martes que tiene "la  conciencia limpia" y que volvería a actuar de la misma manera.

Darren Wilson dijo que temió por su vida antes de accionar su arma  reglamentaria -la primera vez que lo hacía desde que operaba en la ciudad de la  periferia de St Louis-, matando al joven de 18 años Michael Brown.

"La razón de que tenga la conciencia limpia es que sé que actué de manera  correcta", dijo Wilson a ABC News, en sus primera declaraciones sobre el tema  desde los hechos del 9 de agosto pasado. 

Interrogado acerca de si hubiera reaccionado de la misma forma si Brown  hubiera sido blanco dijo que "Sí... sin duda".

El policía describió a Brown como "un hombre potente". "Iba a matarme",  agregó. 

El lunes un gran jurado decidió no inculpar a  Wilson, un fallo que disparó  una serie de violentos enfrentamientos en Ferguson, una localidad de 21.000  habitantes en la que la mayoría de los policías son blancos.