Esta semana, la oficial de la policía alemana Alexandra Klein solicitó al departamento OS-9 de Carabineros, dependiente de la Dirección de Investigación Criminal, información sobre dos chilenos detenidos en Alemania vinculados a nueve robos a casas, donde habrían sustraído objetos electrónicos por más de 3 mil euros. Incluso algunos fueron enviados a Chile.

La comunicación entre ambas policías y las solicitudes correspondientes comenzaron hace poco más de un mes, cuando un grupo de efectivos chilenos se trasladó a Munich para intercambiar información con la policía alemana sobre un chileno, investigado por el robo de cajeros en el casino Monticello, que estaba en Europa y que cayó por un delito similar.

El sospechoso, parte de una banda investigada por el Ministerio Público, fue capturado tras protagonizar un robo a un dispensador de dinero con el método de saturación por gas en la ciudad alemana. Esto motivó que el fiscal a cargo, Javier von Bischoffshausen, viajara a Europa junto a miembros del OS-9.

"Esto llamó la atención de algunas policías en Europa, de cómo se investigaban los robos a casa sin moradores y también el robo con violencia en estas (...) como también la participación de chilenos detenidos por estos delitos", afirma el teniente coronel de la Dirección de Investigación Criminal de Carabineros, Víctor Blanco.

A partir de esas reuniones, la policía uniformada estableció un acuerdo con sus pares de Alemania, Francia y España para intercambiar información sobre la participación de chilenos en estos delitos. Para esto, traspasarán sus experiencias en la investigación de asaltos a hogares en el sector Oriente de Santiago.

Al tiempo de confirmado el lazo, se determinó que solo en estos tres países europeos hay 39 chilenos detenidos por esta causa. A los dos capturados en Alemania, se suman 21 que cayeron en Francia: ocho por robar cajas fuertes y 13 por ataques a viviendas. Más al sur, en España, 16 sujetos están en la cárcel por el mismo delito.

En el caso de los apresados en Alemania, ambos poseen un amplio prontuario policial. Uno es de iniciales R.N.C de 29 años y en Chile tiene nueve condenas por robos violentos. El otro es D. E. C. S de 26 años, con nueve detenciones y una condena por robos.

El teniente coronel Blanco explica que a sus pares europeos les sorprende cómo el OS-9 logra identificar a los individuos involucrados en estos delitos, aplicando procesos como el del ADN, el rastro dactilar y la identificación descriptiva.

"En Europa tienen menos delitos violentos a inmuebles particulares, principalmente allá es el robo sin moradores. Les llama mucho la atención saber cómo logramos identificar a los individuos", agrega el oficial de Carabineros.

Pese a esto, Blanco afirma que el principal interés de las policías europeas es "intercambiar información de cuando los chilenos estaban siendo investigados" y "cómo lograban enviar a Chile los bienes sustraídos".

Así, estas policías han solicitando información sobre sus vínculos criminales en el país.

El teniente coronel Blanco señala que entre los principales receptores de los delincuentes se encuentran convivientes, hijos y otros familiares.

Para el director ejecutivo de la Fundación Ciudadano Seguro, David Rozowski, "todas las alianzas de inteligencia policial son bienvenidas. Aunque creo que Chile debería tener lazos no solo con estos países sino que a nivel mundial, pues el delito no es local sino que es un tema internacional".

El experto en seguridad explica que "los delincuentes chilenos que están en el extranjero lo han hecho porque acá se han sentido acorralados en investigaciones y en su modus operandi".

Asimismo, agrega que "con tal de cumplir sus objetivos llegan a herir personas e incluso portan armamento. Por eso, las policías en Europa tienen preocupación con ellos".