Las cifras le sonríen a Evo Morales. A dos años de los comicios de 2014, en los que su partido quiere que participe para buscar su segunda reelección, el presidente boliviano vuelve a contar con la aprobación de la mayoría en su país. Así lo reveló un sondeo de la encuestadora privada Ipsos difundido ayer por el diario El Deber, el cual muestra un repunte de 11 puntos en la popularidad del mandatario en sólo seis meses. Así, ésta hoy llega al 59%. Morales se ubica por primera vez en un año muy cerca del 64% con que fue elegido para  un segundo mandato en 2010.

Morales, quien en abril pasado tenía un respaldo de 48%, vio caer en tanto su desaprobación en 13 puntos en el mismo lapso (de abril a octubre), de 46% a 33%.

Las zonas rurales nuevamente se constituyen en el nicho electoral de Morales con un 69% de aprobación, según el sondeo. En cambio, en la zona urbana el respaldo cae al 53%. En las ciudades, consigna El Deber, el mayor índice de respaldo a su gestión está en los estratos económicos más desfavorecidos, en los que alcanza el 67%, frente a un 37% de apoyo en los niveles sociales de mayor poder adquisitivo.

"Es la presencia constante (de Morales) en los medios, la propaganda gubernamental y la entrega de obras, que son utilizados con fines de persuasión y modificación de las percepciones ciudadanas", explica a La Tercera el analista político Carlos Cordero. "Esto ha servido para consolidar el apoyo de la gente en el área rural y para cambiar la percepción negativa de la población urbana (clase media). Es toda una estrategia comunicacional y política de cara a las elecciones de 2014", agrega.

El sondeo ratifica ese análisis en cuanto a las razones de la aprobación de Morales. Así, un 21% valora las obras ejecutadas, como caminos y escuelas; el 16% resalta que ayuda a los pobres y el 11% considera que ejecuta una buena gestión gubernamental. En cuanto a los motivos de desaprobación, la respuesta mayoritaria (19%) indica de que no gobierna para todos, mientras que el 15% señala que hay una mala gestión gubernamental y el 10% reclama más capacidad de resolución de conflictos.

Hasta ahora, el nivel más bajo del mandatario ha sido el 34% obtenido a principios de 2011, tras un duro ajuste en el precio de los combustibles que el mandatario anuló a los pocos días ante la ola de protestas populares. Su techo ha sido de 69% en enero de 2010, cuando comenzó su segunda gestión. Morales llegó a la presidencia en enero de 2006, luego de ganar las  elecciones con el 54% de los sufragios.

La oposición política todavía es débil, carece de un solo líder y está dividida, asegura la agencia AP. Su nivel de aprobación apenas alcanzó a 24%, según el mismo sondeo.

Este sector ha puesto en duda la legalidad de una nueva postulación de Morales a la presidencia, reelección que ya fue lanzada por el oficialismo. "Constitucionalmente estoy habilitado para ir a la reelección", afirmó el mandatario en septiembre, aunque aclaró que hasta el momento no decide si tomará o no ese paso.