Visiblemente emocionada se mostró María del Pilar Pérez, luego de que el Ministerio Público exhibiera imágenes de su vivienda de calle Seminario 95, en Providencia. Esto, en el marco del juicio que se sigue en su contra y también, en contra del supuesto sicario José Ruz, por el crimen de Diego Schmidt-Hebbel, así como el doble homicidio del ex esposo de la mujer, Francisco Zamorano, y su pareja, Héctor Arévalo.

La profesional se quebró, luego de que la perito de la PDI Mónica Sotomayor mostrara al tribunal las fotografías de la casa que la mujer dejó de habitar el 6 de noviembre del 2008, tras ser detenida como autora intelectual del asesinato de Diego Schmidt-Hebbel.

Al término de la audiencia el abogado Mario Palma, defensor de la profesional, afirmó que su representada se mostró afectada ya que "es una persona con todas las carencias de una persona que está privada de libertad".

TESTIMONIOS

La fiscalía presentó a dos médicos como testigos en el noveno día de juicio oral.

En la primera parte prestó declaración la doctora, jefa de la UCI del Hospital del Salvador, Sheila Cerda, quien confirmó que María del Pilar Pérez puso en riesgo su vida al intoxicarse con fármacos, el 6 de noviembre de 2008. La facultativa recibió a la arquitecta cuando fue atendida de urgencia aquel día.

Posteriormente narró su versión Rafael Vizuete, psiquiatra del hospital penal de la cárcel, quien sometió a dos evaluaciones a la mujer. Concluyó que la imputada tiene una depresión estable, "con personalidad narcisista e histriónica, insensible, arrogante y cuesta empatizar con ella". Además, observó rasgos de "psicopatía".