Un día después de que Claudio Santander se explayara sobre las potenciales ofertas que está analizando el directorio de Empresas Masvida, el entusiasmo parece diluirse.
Entre los potenciales interesados, Guillermo Harding, accionista de Cruz Verde, sonó casi como seguro. Sin embargo, fuentes de mercado afirman que lejos de ser él quien busca comprar parte de las clínicas, fue la propia EMV la que les fue a ofrecer sus activos, tal como lo ha hecho con otros inversionistas en las últimas semanas. Y aunque el empresario efectivamente estaría estudiando la opción, esta no se cerraría en el corto plazo, como espera el presidente de Masvida, Claudio Santander, a fin de calzar una oferta concreta con la entrega del Plan de Ajuste y Contingencias (PAC) a la Superintendencia de Salud.
Otro de los potenciales inversionistas sería Red Salud, ligada a la Cámara Chilena de la Construcción (CChC). Hace unos días Inversiones la Construcción (ILC) compró a Masvida su participación de 13,2% en la Clínica Magallanes. Sin embargo, fuentes del mercado descartan que exista un interés adicional por una parte o el total de las clínicas del holding. Entre otras razones, porque se trataría de negocios que no tienen buenos números.
Un tercer candidato sonando en el mercado como posible interesado es el empresario penquista Javier Alvarez, quien encabeza el grupo de inversionistas que compró el Sanatorio Alemán de Concepción, junto a Gamma Capital, fondo que ya hizo una oferta a Masvida en carrera con Southern Cross (SC). Al ser consultado, Alvarez aclaró que "si bien siempre estamos buscando negocios, para ser honestos en Masvida no estamos viendo nada". Agregó que "si hubiera la posibilidad de estudiar un negocio en un proceso serio y ordenado, por supuesto, pero por lo que teníamos entendido era un negocio de Southern Cross y por tanto no tenemos ningún estudio formal al respecto".
Directorio clave
Este jueves el directorio de Masvida analizará una serie de propuestas de asesores especializados, con miras a configurar un plan de reestructuración para la compañía, que debiera ser llevado al regulador de salud como parte del PAC. Agentes del mercado sostienen que dentro de las opciones que se barajarían está la aplicación de un plan similar a la operación de salvataje de La Araucana, de acuerdo a la Ley 20.720, sobre Reorganización y Liquidación de Empresas y Personas.
La idea sería recuperar la compañía de su mala gestión financiera, siendo el peor escenario la liquidación de la Clínica Las Lilas, principal activo de la firma que hoy atraviesa un complejo escenario patrimonial.
Santander pidió al Superintendente Sebastián Pavlovic más plazo para entregar el PAC, lo que está en análisis. Eventualmente esto sería para alcanzar a entregar una oferta concreta de socio unida a un plan de reestructuración. Pero, según Pavlovic, más allá de la legada de un socio estratégico, lo relevante son las medidas de gestión interna para superar la situación.
"No corresponde que esté todo entregado a la posibilidad de llegar a acuerdo con un socio. Además nos parece que dado el tamaño de la isapre, tomando las medidas adecuadas, pueden sortear esta situación", recalcó.
El regulador ha aprobado a la isapre rebajas a las exigencias de garantías por cerca de $ 37 mil millones, para pago de deuda con terceros no relacionados. Pero sus cifras no mejoran. Según Pavlovic, "parte de este empeoramiento tiene que ver con las instrucciones que se le han dado de sincerar activos", dijo. "Cuando se sobre estima la capacidad para recuperar dinero, todas esas instrucciones que hemos dado para sincerar esos balances, obviamente han tenido un impacto en el estado financiero de la isapre. Eso genera esta sensación de que la situación es mucho peor de lo que había hace seis meses", precisó.
Los que no están convencidos ni con las cifras ni con las informaciones de Santander son los presidentes de las sociedades de inversión. El doctor Aliro Bolados -presidente de una de las 84 sociedades dueñas de EMV-, que cuestionó el proceso de venta del 55% a SC, dice no tener "certeza de la veracidad de la información que reciben".
Por ello, junto a otros pares evalúan pedir una junta extraordinaria de accionistas para "saber cuáles fueron las reales razones de la caída de la oferta de SC, y el detalle de la carta en que esa empresa daría a cuenta de un due dilligence insatisfactorio", afirmó.