Las firmas italianas Prada y Fendi trasladaron sus desfiles de la Semana de la Moda de Milán para aplazar lo que consideraban una pesadilla de tres días de colecciones para la prensa y los compradores, a una más manejable de cinco días.

Prada, que tenía programada su pasarela para el 26 de febrero y Fendi, que estaba programada para el 27 de febrero, se movieron para el 25 de febrero y 1 de marzo, respectivamente, para extender la semana a un ritmo más pausado.

"Todos debemos estar agradecidos (con Prada y Fendi)", señaló al portal WWD Mario Boselli, cabeza de la Cámara Italiana de la Moda. "Finalmente el buen juicio preveleció".

"Era la única cosa inteligente que hacer", dijo un portavoz de Prada. "Nos movimos para hacer más fácil la vida de todos - y especialmente por respeto a aquellos diseñadores cuyo trabajo se verían penalizado de una u otra manera".

La Semana de la Moda de Milán, la cual presentará las principales tendencias Otoño-Invierno 2010-2011 en ropa femenina, se realizará desde el 24 de febrero al 3 de marzo.