Los precios al consumidor en Estados Unidos subieron en enero debido a que un clima inusualmente frío impulsó la demanda por electricidad y combustible para calefacción, aunque las presiones inflacionarias se mantuvieron contenidas.

El Departamento del Trabajo dijo este jueves que su índice de precios al consumidor avanzó un 0,1% y que el incremento en el costo de la energía de los hogares respondió por la mayor parte del alza.

El IPC había subido un 0,2% en diciembre, y el incremento del mes pasado estuvo en línea con lo pronosticado por los analistas.

En los 12 meses a enero, los precios al consumidor avanzaron un 1,6% luego de elevarse un 1,5% interanual en diciembre.

Eliminando los volátiles componentes de energía y alimentos, el llamado IPC subyacente subió un 0,1% por segundo mes consecutivo. En 12 meses a enero, el IPC subyacente subió un 1,6%, desacelerándose desde el alza de 1,7% en diciembre y anotando el menor avance desde junio.