La casa de dos dormitorios de Gonzalo Demarchi en Buenos Aires estuvo en el mercado 18 meses antes de que pudiera venderla, con una rebaja del 25%.

Eso en parte se debió a que Demarchi, como la mayoría de los vendedores, sólo aceptaba dólares estadounidenses debido a que el peso argentino se está debilitando. También puede atribuirse a que el mercado hipotecario del país, que se hallaba en crecimiento, se está reduciendo en vista de que las tasas de interés se encuentran en el nivel más alto en cinco años, obligando a los compradores a pagar en efectivo con dólares difíciles de conseguir.

Más de dos años de restricciones a la compra de la moneda estadounidense han hecho bajar los precios de las viviendas en Argentina por primera vez desde 2002. El debilitamiento del peso, que este año caerá 20% impulsa a los vendedores como Demarchi a pedir dólares. Y con las tasas de referencia en 28,9% para hacer frente a una inflación del 37%, la utilización de préstamos para la vivienda se fue a pique.

"El mercado inmobiliario recibió un impacto enorme por los controles monetarios porque los precios están en dólares y no hay préstamos hipotecarios", dijo José Rozados, director de la firma de investigación Reporte Inmobiliario, en una entrevista telefónica. "Como la inflación no va a bajar a un nivel razonable en lo inmediato y con los controles monetarios todavía vigentes, la situación probablemente se deteriore".

Los precios de las viviendas bajaron 10% interanual en dólares en mayo, según la firma de investigación de Buenos Aires Reporte Inmobiliario. Sólo el 4,4% de las 24.408 compras de propiedades que se realizaron en la provincia argentina de Buenos Aires este año hasta fin de mayo incluyeron hipotecas, el porcentaje más bajo registrado en datos que se inician en 1998.

El año pasado, el 20% de las compras de viviendas se llevaron a cabo con hipotecas, por encima del 17% del año anterior. Las viviendas adquiridas con préstamos bancarios no superan el 21% del total en los últimos catorce años.

La nota del banco central argentino a tres meses, tasa de préstamo de referencia del país, este año subió a 28,9%, la más alta del mundo, de acuerdo con los datos que reunió Bloomberg. Las tasas de referencia de similar vencimiento en Brasil, México y los Estados Unidos son de 10,7%, 2,9% y 0,1% respectivamente.

Los esfuerzos del gobierno para impulsar la creación de un mercado hipotecario eficaz tampoco han tenido éxito. Este ofreció tasas subsidiadas de 2% a 14% para financiar viviendas nuevas construidas en terrenos estatales. Sin embargo, el gobierno no tiene suficientes fondos para ofrecer préstamos a la población general, y las 79.333 hipotecas otorgadas desde que comenzó el proyecto en junio de 2012 no son suficientes para reactivar el mercado de la vivienda.