Fiscales de Oklahoma investigan denuncias de que el ex chef y el ex jefe de jardineros de la mansión del gobernador violaron a tres presas que habían sido designadas para trabajar en la residencia oficial.
Ninguno de los dos hombres ha sido acusado formalmente, pero el Departamento de Servicios Centrales los despidió el 29 de septiembre por violar políticas internas luego de una investigación de tres meses del Departamento de Correccionales.
Las acusaciones generan dudas sobre la seguridad en la residencia del jefe del ejecutivo estatal, y sobre la supervisión que tiene un programa que en parte busca recompensar el buen comportamiento de los prisioneros al permitirles salir durante el día a trabajar fuera de la cárcel.
El Departamento de Correccionales del estado cree que los ex empleados que supervisaban en la mansión a las internas del Centro Correccional Comunitario Hillside cometieron agresión sexual, sodomía forzada y violación, dijo el lunes Jerry Massie, vocero del departamento. Hace poco el departamento entregó los resultados de su pesquisa a la oficina del fiscal de distrito del Condado de Oklahoma, David Prater.
Scott Rowland, vicefiscal de distrito, dijo el lunes que los fiscales se reunieron con investigadores correccionales durante dos horas el viernes y que la pesquisa continúa.
Según documentos oficiales a través de una petición de apertura de registros estatales, los trabajadores despedidos son el ex chef ejecutivo de la mansión, Russell Humphries, y el ex supervisor de jardineros, Anthony Bobelu. Ninguno de ellos respondió a varias llamadas en busca de declaraciones y los fiscales desconocen si tienen abogados.
El Departamento Correccional está entrevistando a otras mujeres que participaron del programa, dijo Massie.
Las mujeres, dos de las cuales ya fueron liberadas, dicen que los incidentes ocurrieron entre marzo del 2008 y enero pasado. La investigación correccional no comenzó hasta el 1 de junio, cuando una de las mujeres hizo la denuncia luego de salir de la cárcel, dijo Massie.
Los presuntos abusos ocurrieron en un edificio de almacenaje que está fuera de la cerca de seguridad que rodea el predio de la mansión, agregó Massie. No indicó si las mujeres dijeron ser atacadas más de una vez cada una.
Janet Roloff, la abogada de una de ellas, dijo el lunes que su cliente sufrió una "violación violenta y sangrienta" que le dejó secuelas físicas y emocionales.