El titular de la Cámara de Representantes de EE.UU., el republicano John Boehner, pidió hoy al presidente Barack Obama que permita las exportaciones de gas natural para aliviar la crisis en Ucrania y responder a la "hostilidad" de Rusia en Crimea.
"Estados Unidos tiene la responsabilidad de defender la libertad y la democracia en todo el mundo, y tenemos la responsabilidad de apoyar al pueblo de Ucrania frente a la invasión de Rusia", señaló el presidente de la Cámara baja en un comunicado.
Añadió que "vamos a trabajar con el Gobierno de Obama en medidas para que Rusia sufra las consecuencias de sus actos hostiles. Un paso inmediato que el presidente puede y debe tomar es acelerar inminentemente la aprobación de las exportaciones de gas natural de Estados Unidos".
Boehner argumentó que el país tiene "abundantes suministros de gas natural" que pueden ser de gran ayuda a sus aliados y los procesos para la aprobación de su exportación en el Departamento de Energía son tan lentos que se traducen en una "prohibición 'de facto'".
El presidente de la Cámara de Representantes reiteró que esos procesos tan largos han ayudado al presidente ruso, Vladímir Putin, "a financiar sus objetivos geopolíticos al forzar a otras naciones a depender energéticamente de Rusia".
"No hay que obligar a nuestros aliados a que sigan dependiendo de Putin para sus necesidades energéticas. Terminar la prohibición 'de facto' y agilizar la aprobación de las exportaciones de gas natural es un paso claro que Estados Unidos puede tomar para ayudar a nuestros aliados y hacer frente a la agresión rusa, a la vez que fomentará la creación de empleos", aseveró Boehner.
El legislador republicano se unió así a otros compañeros de bancada, como el excandidato presidencial y legislador Paul Ryan, quien ya habían propuesto en los últimos días que Obama impulsara esa medida.
Precisamente este martes, el gigante gasístico ruso Gazprom anunció que dejará de vender gas a Ucrania a precio reducido a partir de abril.
El presidente de la compañía, Alexei Miller, comunicó al primer ministro ruso, Dmitri Medvédev, que Ucrania ha pagado hasta ahora menos del 50 % de su deuda con Gazprom y sigue debiendo 1.529 millones de dólares al consorcio ruso.
A su vez, el jefe del Gobierno ruso advirtió de que el Ejecutivo de Ucrania "debe entender que sobre él recaerán todas las consecuencias" por no pagar a tiempo la deuda contraída por la compra del gas ruso, "entre ellas la anulación de los acuerdos alcanzados antes sobre los suministros privilegiados de gas", según indicó.