El Presidente de Guatemala, Alvaro Colom, anunció hoy una investigación para establecer si el asesinato del abogado Rodrigo Rosenberg, del cual fue exculpado, formaba parte de una conspiración para derrocarlo, pero aclaró que no habrá ninguna "cacería de brujas".
Durante una reunión con la prensa extranjera en Casa Presidencial, Colom sostuvo que como presidente tiene la obligación de hacer cumplir la ley y que ordenó que un equipo legal haga un análisis objetivo, para no caer en omisión, de los hechos que se le imputaron.
En su opinión, hubo "sapos y culebras" que se subieron a un carro que no era el correcto, y aprovecharon la situación para acusarlo del asesinato del abogado sin pruebas ni fundamentos.
"Hubo gente que creyó, que se subió y se aprovechó y en el río revuelto se juntaron todos los vampiros y empezaron a chupar sangre", dijo en referencia a algunos líderes políticos y empresarios que lo señalaron por el crimen y pidieron su renuncia.
El jefe de Estado explicó que no se quiso hacer antes el análisis porque no se había dado un resultado público de la investigación del asesinato, a cargo de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig), que dirige el jurista español Carlos Castresana.
El magistrado español reveló el martes que, según las pesquisas, fue el propio Rosenberg quien planificó su asesinato, perpetrado el 10 de mayo de 2009, y exculpó al Presidente y a la primera dama, Sandra Torres, entre otros, de haber estado implicados en el crimen.
Según Castresana, Rosenberg, quien en un video culpaba al mandatario guatemalteco de su asesinato, actuó solo y no hubo ninguna conspiración.
Colom sostuvo que no recomendará ni impulsará "ninguna cacería de brujas" y que "simplemente hará, con objetividad, una investigación para ver si hubo manipulación y asociación para "derrocar a una autoridad electa".
"Al conocer el resultado se tramitará por el sistema de justicia", acotó.
El gobernante añadió que una vez hecha pública la investigación de la Cicig, en las próximas semanas se va a ir aclarando el resultado de "una pésima obra de teatro, de una infamia" que se montó en su contra.
Asimismo, reiteró que si en la investigación, que hace el equipo legal del Estado, alguien se salió de la ley, "la tiene que afrontar", pero enfatizó que "no hay ningún espíritu de venganza".
"Nosotros dijimos la verdad siempre y ahora se confirmó, entonces alguien mintió, se metió a especular y jugó mal las cartas y yo he aprendido en política que las facturas de éxito se cobran y las metidas de pata se pagan", concluyó el mandatario.