El presidente de Sri Lanka, Mahinda Rajapaksa, obtuvo hoy un segundo mandato, pero su rival, el general Sarath Fonseka, rechazó los datos oficiales arguyendo que habían sido "manipulados" y denunció que las autoridades pretenden arrestarlo.

Según los resultados, publicados hoy en la página web de la Comisión Electoral, el actual presidente logró ayer una holgada victoria en los comicios presidenciales, con el 57,88 por ciento de los votos.

Rajapaksa se convierte así en el sexto presidente de la República Democrática Socialista de Sri Lanka y en el primero de la posguerra, después de que 25 años de conflicto armado con los Tigres para la Liberación de la Patria Tamil (LTTE).
 
Fonseka, por su parte, obtuvo sólo el 40,15 por ciento,  que reflejan la participación del 74,4 por ciento de los 14,1 millones del censo de votantes.

Poco más de 1,5 millones de los votantes censados correspondían a las áreas del norte de Sri Lanka, pobladas por la minoría tamil, cuyo voto o abstención a falta de candidato propio se consideraba relevante para determinar el resultado electoral.

EJERCITO RODEA HOTEL DE FONSEKA
La situación amenaza con volverse tormentosa, luego de que esta mañana el hotel del centro de Colombo en el que se aloja Fonseka fuera rodeado por el ejército, el que no dejó votar ayer al candidato por no estar en el censo con su familia y equipo.

En un comunicado remitido a la agencia EFE, Fonseka denunció que todos los resultados emitidos hasta ahora han sido manipulados.

"No confíen en los resultados que les presenten, no son oficiales", advirtió el candidato, quien aseguró que su  hotel, el Cinnamon Lakeside, estaba sitiado y que las tropas estaban esperando la "orden final" para arrestarlo junto a su familia.

El portavoz del ejército de Sri Lanka, Udaya Nanayakkara, confirmó el despliegue de soldados, pero lo justificó por la presencia de desertores militares en el interior del recinto.

"Queremos que los desertores salgan y se rindan", añadió Nanayakkara, quien no pudo confirmar si éstos llevan armas.

Asimismo, el portavoz rechazó contundentemente que las tropas tengan la intención de detener al candidato opositor y sus familiares.