El presidente afgano, Hamid Karzai, ordenó a las fuerzas especiales de Estados Unidos abandonar la provincia de Wardak en dos semanas.
La decisión fue tomada tras denuncias de desapariciones y torturas por parte de afganos que trabajan con las tropas como fuerzas de choque ilegal, dijo el portavoz presidencial, Aimal Faizi, quien afirmó que Karzai tomó la decisión en una reunión con los servicios de inteligencia afganos, detalla la cadena BBC y The New York Times.
Wardak ha sido objeto reciente de las operaciones de contrainsurgencia. "Hay algunas personas, algunos afganos, que trabajan dentro de estas células, dentro de estos grupos de fuerzas especiales de EEUU" en la provincia de Wardak, dijo Faizi.
Esta misma semana, el presidente afgano había emitido una orden que prohíbe al Ejército solicitar asistencia aérea a la OTAN durante ofensivas militares en zonas habitadas por el riesgo que conllevan para la población civil.
La misión de la OTAN en Afganistán, la ISAF, insiste en que las fuerzas aliadas tienen como prioridad la seguridad de los civiles.
La muerte de civiles es uno de los principales puntos de fricción entre las autoridades afganas y la OTAN, y en 2011 Karzai amenazó con declarar como "invasoras" a las tropas extranjeras si no cesaban los bombardeos aliados contra viviendas civiles.
Según un informe de la ONU publicado el pasado lunes, en 2012 fallecieron 2.759 civiles en Afganistán, de los que el 8 % se atribuye a la acciones de la ISAF y a las fuerzas afganas, agrega EFE.