Bernardo Larraín Matte, presidente de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), comentó en La Tercera TV la polémica por la modificación que habría sufrido el ranking de competitividad de Chile durante la administración de la Presidenta Bachelet, que fue dada a conocer ayer por el economista jefe del Banco Mundial, Paul Romer.
Larraín sostuvo que "si fuera manipulación con orientación política sería muy grave, eso no hay que relativizarlo".
Y agregó que esto se puede tratar de "una manipulación, como insinuó Romer, o un cambio metodológico pero si se aplica a todos los países por igual no habría problema".
El presidente de la Sofofa explicó que este ranking es considerado por los inversionistas extranjeros que vienen por primera vez a Chile. Pero en el caso de los inversionistas que están en Chile se trata de un indicador "tardío" respecto de la temperatura que captan sus propios negocios.
Sobre los efectos que habría tenido la modificación del Doing Business en los proyectos de inversión, Larraín sostuvo que los empresarios analizan "miles" de indicadores y no sólo esta medición.
"Todos los indicadores que se desarrollan por las instituciones extranjeras son útiles, pero no se pueden decir que son definitorios", comentó.
El líder de la Sofofa insistió en que aún se debe esclarecer si se trata de un "error", tal como lo dijo Romer.
Y agregó: "Insisto, las decisiones de inversión, que son complejas y que se deben tomar respecto a múltiples variables, pensar que sólo se toman respecto al Doing Business, no es responsable decir eso".
Además sostuvo que decir que tuvo un efecto en la elección presidencial, "escapa de toda razonabilidad". "Los ciudadanos en Chile son los primeros en medir la temperatura del país y no necesitan al Banco Mundial para que se les diga".