Ucrania no permitirá la rotura de los acuerdos de paz firmados en septiembre en Minsk y trabajará para garantizar su completa aplicación, dijo hoy el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, al abrir la sesión urgente del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa (CSND) de su país.

"No permitiremos romper los acuerdos de Minsk. Todo debe basarse exclusivamente en ellos. Y ahora debemos garantizar su total e ineludible cumplimiento, también a través del Grupo de Contacto (Rusia, Ucrania y la OSCE)", subrayó el gobernante ucraniano.

Dos días después de que los separatistas iniciaran una amplia ofensiva contra las tropas ucranianas en todo el frente que recorre el este del país, Poroshenko mostró preocupación por la declarada intención de los prorrusos de poner fin a las negociaciones y conquistar todo el territorio de las regiones de Donetsk y Lugansk.

El presidente ucraniano reiteró que Kiev se adhiere a los acuerdos firmados en septiembre en la capital bielorrusa "sobre la implementación del plan de paz, el cierre de la frontera (con Rusia), la liberación de los rehenes, la retirada de la artillería pesada y el alto el fuego".

Los separatistas dejaron hoy claro que en las actuales circunstancias -en medio de combates que parecen recuperar la intensidad del pasado verano- la reanudación de las negociaciones de paz en Minsk se aleja como posibilidad factible a corto plazo.

"Creo que la convocatoria del Grupo de Contacto en Minsk no tiene sentido en las condiciones actuales", dijo el jefe negociador en el proceso de paz de la autoproclamada República Popular de Lugansk, Vladislav Deinego.

Su homólogo en la vecina República Popular de Donetsk (RPD), Denís Pushilin, tachó de "cínicas" las palabras de Poroshenko sobre los acuerdos de paz y recordó que fue el presidente ucraniano quién ordenó "tomar el aeropuerto" de Donetsk, que según los prorrusos, "debía pasar bajo nuestro control" en virtud del Protocolo de Minsk. 

Mientras, el presidente ucraniano reiteró hoy que el brutal ataque con artillería que se llevó ayer la vida de 30 civiles en la ciudad de Mariúpol fue perpetrado por los separatistas, y aseguró que Kiev dispone de pruebas para demostrarlo.

"La grabación de conversaciones telefónicas y por radio (de los rebeldes) que me ha presentado el Servicio de Seguridad de Ucrania (antiguo KGB), demuestra de manera irrefutable que el ataque fue perpetrado por los terroristas", afirmó Poroshenko.

El líder ucraniano, que esta madrugada volvía a pedir incrementar la presión internacional sobre Rusia -a la que Kiev acusa de estar detrás de todas las decisiones que toman los separatistas- anunció durante la sesión del CSND que los ministros de Exteriores de la UE se reunirán mañana para tratar este asunto.

"Mañana tiene que celebrarse una reunión de los ministros de Exteriores de la UE, en la que se coordinarán los pasos a seguir para garantizar la seguridad de Ucrania e incrementar la presión sobre la Federación de Rusia", aseguró Poroshenko.

Treinta civiles murieron ayer y casi un centenar resultaron heridos en un ataque con artillería contra una zona residencial de Mariúpol que se producía en medio de una amplia ofensiva lanzada por los rebeldes prorrusos en todo el este de Ucrania.