En el sector de Martin Place, en Sydney, un hombre de 49 años mantuvo retenidos a un grupo de 17 rehenes por más 16 horas en una cafetería. El sujeto, identificado Man Haron Monis, un auto proclamado clérigo musulmán murió durante un enfrentamiento con la policía local que intercedieron en el local comercial para rescatar a los sujetos que se encontraban capturados. Tres personas fallecieron y cuatro resultaron lesionadas.

El secuestrador iraní que protagonizó el hecho era "un extremista y padecía problemas mentales", afirmó este martes el primer ministro australiano, Tony Abbott, que  definió el acto como "un encontronazo con el terrorismo".

Según él, el individuo, muerto en el ataque de las fuerzas especiales de la  policía, "tenía un largo historial de delitos violentos, extremismo e  inestabilidad mental". 

"A medida que avanzaba el asalto (...) trató de  inscribir sus actos en el simbolismo del culto de la muerte del Estado  Islámico", el grupo yihadista que siembra el terror en parte de Siria e Irak,  añadió Abbott.