El primer ministro británico, Gordon Brown, urgió hoy en Londres a su colega israelí, Benjamin Netanyahu, a frenar la construcción de asentamientos en territorio palestino, porque constituyen una "barrera" para la solución del conflicto.
En una conferencia de prensa conjunta celebrada tras reunirse con Netanyahu en su oficina de Downing Street, el "premier" británico dijo compartir con su homólogo la idea de "un Israel seguro y con confianza" aceptado por una "Palestina que sea segura y viable".
Brown también apoyó "los recientes movimientos (israelíes) para retirar puestos de control en Cisjordania", pues "hay que permitir que la economía palestina prospere", e incidió en que "el diálogo político debería estar apuntalado por hoja de ruta económica".
Sin embargo, el jefe del Ejecutivo de Londres subrayó que "la actividad de los asentamientos es una barrera para la solución de los dos Estados".
"Estoy cada vez más convencido, no obstante, de que hay una verdadera voluntad de avanzar, pero el detenimiento de esas actividades resultaría en pasos significativos hacia una normalización con los estados árabes", apuntó Brown.
Al igual que el Gobierno británico, la Administración del presidente estadounidense, Barack Obama, ha exigido a Israel paralizar la edificación de asentamientos en zonas palestinas como condición para reactivar las negociaciones de paz.
Sin embargo, Netanyahu, que accedió a Downing Street por una puerta trasera debido a una manifestación pro palestina convocada en la entrada principal, se mostró hoy reacio a aceptar esa exigencia, si bien reiteró "el compromiso de Israel con la paz".
Según Netanyahu, "el tema de los asentamientos está pendiente y es uno de los asuntos que deben resolverse en las negociaciones, junto al reconocimiento palestino del Estado judío y una efectiva desmilitarización (palestina) para un futuro acuerdo de paz".
Acerca de la expansión israelí en Jerusalén Este (que Israel se anexionó tras la Guerra de los Seis Días en 1967), el gobernante judío no se anduvo con rodeos: "Jerusalén aseveró es la capital soberana de Israel y no aceptamos limitación alguna sobre nuestra soberanía. Jerusalén no es un asentamiento".
Pese a todo, Netanyahu aseguró disponer de una "fórmula ganadora para la paz", consistente en "un Estado palestino desmilitarizado que reconozca el Estado de Israel".
"Estamos trabajando duro para lograr unos avances en un proceso de paz que conduzca a un verdadero resultado de paz. Esperamos avanzar en las próximas semanas y meses", apuntó el líder israelí, mientras el Gobierno de Estados Unidos trabaja en un plan de paz para la región que tiene previsto presentar este otoño.
Netanyahu hizo también hincapié en la desmantelación de "147 puestos de control" en Cisjordania "para facilitar el movimiento", y reclamó "acciones similares" por parte de los palestinos.
"Esperamos insistió que nuestros socios palestinos tengan coraje para avanzar. Tiene que haber un socio valiente al otro lado. Es esencial que el liderazgo palestino le diga al pueblo palestino que debe aceptar a Israel como un Estadonación".
Ambos mandatarios abordaron igualmente el contencioso nuclear de Irán y coincidieron en condenar cualquier intento de la República Islámica de dotarse de la bomba atómica.
"Compartimos la inquietud de Israel sobre la ambición iraní para desarrollar un arma nuclear", afirmó Brown, que amenazó a Teherán con más sanciones, a menos que coopere con la comunidad internacional.
A ese respecto, Netanyahu abundó en "la necesidad de impedir que Irán desarrolle armas nucleares", ya que "esas armas suponen una gran amenaza para Israel, la región y el mundo".
Londres es la primera etapa de una gira europea de cuatro días que Netanyahu aprovechará para entrevistarse mañana, también en Londres, con el enviado especial de Estados Unidos para Oriente Medio, George Mitchell.
Ya el jueves, el primer ministro israelí se reunirá en Berlín con la canciller alemana, Angela Merkel.