El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, será investigado luego de ser acusado de corrupción esta semana por la cadena de televisión Canal 10, que afirma que el mandatario no informó de todas las fuentes de financiación de su carrera política y además permitió que empresarios pagaran viajes de él y su familia.

El canal de televisión afirmó que Netanyahu recibió en 2005 donaciones privadas que utilizó con fines políticos sin dar a conocer su origen al interventor del Estado, tal como obliga la legislación israelí.

La segunda denuncia se centra en la acusación de que el primer ministro aceptó que hombres de negocios pagaran viajes de recreo que realizó junto a su familia, lo que, según la legislación israelí, no es compatible con el desempeño de un cargo público.

Netanyahu negó ayer las acusaciones, que atribuyó a una "campaña orquestada" en su contra.

En una entrevista emitida por otra cadena de televisión, Canal 2, Netanyahu calificó las denuncias de "crueles e hipócritas", y responsabilizó de las acusaciones a "algunos periodistas a quienes no les gusta el hecho de que sea primer ministro".

Las acusaciones de corrupción obligaron a dimitir de su cargo al predecesor de Netanyahu, Ehud Olmert, que en el verano de 2008 anunció que renunciaba como primer ministro tras denuncias de que había recibido financiación irregular y haber falseado facturas.