El primer ministro Yoshihiko Noda se disponía a disolver el parlamento de Japón para allanar el camino a la realización de los comicios generales de diciembre, en los que podría llegar a su fin el gobierno del Partido Democrático que ha durado tres años.
Según encuestas, el opositor Partido Liberal Democrático, que gobernó Japón de manera casi ininterrumpida desde la era posterior a la Segunda Guerra Mundial, obtendrá el mayor número entre los 480 escaños en la cámara baja, pero no logrará la mayoría.
Posiblemente ningún partido surja como ganador claro en los comicios para la cámara baja y la fuerza política que se alce con el triunfo tendrá que formar un gobierno de coalición. Las elecciones fueron fijadas para el 16 de diciembre.
Noda anunció abruptamente hace dos días que el viernes disolvería el parlamento si la oposición aceptaba reformas cruciales, entre estas una reducción del poder legislativo.