El primer ministro francés, Manuel Valls, calificó hoy de "situación grave" las acusaciones de corrupción contra el ex presidente Nicolas Sarkozy, varios jueces y un abogado, mientras la televisión anunció para esta noche un discurso del ex mandatario.
En la entrevista concedida al canal BFMTV, el socialista Valls destacó la independencia del sistema judicial.
"Nadie está por encima de la ley, pero es importante recordar que la presunción de inocencia vale para todos", afirmó el jefe del gobierno francés. También el actual presidente francés, François Hollande, recordó a través de su portavoz la presunción de inocencia y se refirió a la independencia de la Justicia.
Sarkozy fue imputado por sospechas de corrupción, tráfico de influencias y violación del secreto de instrucción. El ex presidente conservador fue detenido e interrogado el martes durante 15 horas, primero en Nanterre y después en París, donde pudo abandonar el juzgado sobre las 02:00 hora local.
Existe la sospecha de que Sarkozy -presidente entre 2007 y 2012- consiguió para un magistrado del Ministerio Fiscal un puesto como asesor de gobierno en Mónaco. Como contrapartida, el magistrado habría ofrecido a Sarkozy información secreta sobre las investigaciones puestas en marcha contra el ex presidente.
La televisión francesa anunció para esta noche un discurso de Sarkozy, que hasta ahora ha rechazado estas acusaciones. Las investigaciones sobre el posible caso de corrupción llegan en medio de la posible vuelta a la política del ex presidente, en el que muchos conservadores confiaban hasta ahora para ganar las próximas elecciones presidenciales.
Los seguidores de Sarkozy reaccionaron indignados a la noticia pero desde su partido, el UMP, se mostraron cautos. El ex primer ministro Alain Juppé, apuntó en Twitter que la defensa de Sarkozy desmostrará su inocencia. "Así lo espero", afirma Juppé, uno de los tres líderes transitorios del partido hasta otoño, cuando se escogerá un nuevo presidente.