El Príncipe Carlos de Inglaterra reconoció en una visita a Dumfries House, una construcción que ha contribuido a remodelar, que su condición de eterno heredo le genera un cierto grado de impaciencia.

Fue en un video subido a la web de la página de Clarence House y realizado el verano pasado, poco antes de cumplir 64 años, que el príncipe habla de este tema.

"¿Impaciente? ¿Yo? ¡Vaya sugerencia! Sí, por supuesto que lo estoy. Pronto se me acabará el tiempo. Lo habré consumido si no tengo cuidado", comenta en el video.

En el papel, el príncipe lleva 60 años de espera y ya en 2008 se convirtió en el heredero más "paciente" en la historia británica, superando a su tatarabuelo, Eduardo VII.

Según el diario británico The Daily Telegraph,  los analistas expresan que hay grados de frustración en él por no comenzar aún su reinado. "Está impaciente, pero cuando se convierta en rey sus actividades y todos los proyectos con los que disfruta y con los que puede destacar se verán gravemente reducidos", ha declarado Penny Junor, el biógrafo del monarca, al medio.

"Está en una edad en la que la mayoría de la gente comienza a contemplar la jubilación, aunque él en realidad no ha comenzado el trabajo para el que se ha preparado durante toda su vida adulta. Eso es oneroso", consigna por su parte Robert Hazell, director de la unidad constitucional del University College de Londres, en declaraciones recogidas por la prensa británica y que citan diarios españoles.

Ya en 2004, cuando un guardia real le felicitó por su 56 cumpleaños, el heredero bromeó: "Tengo la edad que tenía mi abuelo cuando murió".

Y la posibilidad de un pronto reinado no está tan a la mano, considerando que su madre, la reina Isabel, a sus 86 años se encuentra en buena estado de salud. Además, esta cuota de sinceridad de Carlos llega en un momento de su hijo Guillermo y de su nuera Kate, que han ganado mucho protagonismo.

En una encuesta que Ipsos Mori realizó a principios de este mes, el duque de Cambridge fue elegido como el miembro más popular de la familia real con un índice de aprobación del 62% - la más alta desde que Ipsos Mori comenzó la encuesta real en 1984-. El índice de aprobación de Carlos fue del 21%, por detrás de la reina, el príncipe Enrique y la duquesa de Cambridge, consigna el diario El País.