Un mercado bursátil para transar energías renovables no convencionales (ERNC). Ese es el proyecto en el cual ha estado trabajando sigilosamente desde hace unos cuatro meses la Bolsa de Productos de Chile.
La iniciativa surgió a raíz de la nueva normativa que obligará a las generadoras, a partir de 2010, que al menos el 5% de su energía vendida provenga de fuentes renovables. Las eléctricas tienen como opciones comprar a un tercero esa energía o pagar una multa si no cumplen la exigencia. "Como la nueva ley de ERNC exige a los grandes generadores que un porcentaje de su energía comercializada sea renovable, existe un mercado de derechos que pueden ser transables", explica Christopher Bosler, gerente general de la Bolsa de Productos.
Los privados trabajan en un mecanismo que permita transformar esos derechos intangibles que posee un generador de ERNC en un bien transable y concreto, como un certificado o título, que represente la energía renovable generada y que, a su vez, pueda ser comercializado en el mercado. "Esto implica que, por ejemplo, un actor eléctrico que debe cumplir con la nueva ley, podrá comprar ese certificado que acredite que cumple con la cuota renovable que exige la normativa", indica Bosler.
Para transar esos instrumentos se requerirá contar con un organismo que determinará la cantidad de derechos de cada generador de ERNC y se establecerá un registro de contratos para su transacción. Esa labor la realizaría la Bolsa en un inicio, pero en el futuro podría ser el Centro de Despacho Económico de Carga (CDEC), ente que coordina la operación del sistema eléctrico. "La bolsa actuará como una plataforma de negociación y será un formador de precios públicos para estos derechos, con el fin de dar liquidez e incentivos para una mayor generación de energía renovable", dice el ejecutivo. Una ventaja de este mecanismo, agrega, es que al permitir transacciones públicas, mejorará la capacidad de negociación de los productores de energía renovable.
La bolsa está trabajando en conjunto con GTD Ingeniería para implementar este mercado, y cuenta, además, con la asesoría de Vivianne Blanlot, ex secretaria ejecutiva de la Comisión Nacional de Energía.
Los compradores y vendedores de estos certificados de energía asumirán un costo de intermediación, "que dependerá de los derechos a Bolsa, que aún no se determinan, y de lo que cobrará el corredor", señala Bosler. La duración del certificado se está defininiendo. La partida del nuevo mercado será en 2010.
"No tenemos una fecha, pero esperamos que sea en el primer trimestre", afirma.