La ganancias de Minera Escondida cayeron 91% el primer semestre a US$50 millones frente a US$527 millones del primer semestre de 2016, afectadas por una caída en la producción de cobre, principalmente como resultado de la huelga de 44 días que afectó al yacimiento a principios de año.
La producción cayó 39% a 327.863 toneladas métricas el primer semestre, cifra que se divide en 237.891 toneladas de cobre contenido en concentrados y 89.972 toneladas de cátodos de cobre.
Sin embargo, la menor producción fue compensada en parte por el alza en el precio del cobre el que promedió US$2,61 la libra en la Bolsa de Metales de Londres, cifra superior en 22% al promedio del primer semestre del año pasado.
Los ingresos ordinarios asociados a ventas fueron US$ 2.042 millones, lo que representa una baja de un 25% en comparación al mismo periodo del año 2016, de US$2.739 millones. Esto fue principalmente consecuencia de la menor producción mencionada anteriormente.
Los costos (excluidos costos financieros netos) fueron de US$ 1.899, lo que representa una disminución del 5% en comparación al mismo periodo del año 2016, de US$ 1.991 millones
El resultado por actividades de la operación fue un ingreso de US$ 177 millones, lo que representa una baja del 77% en comparación al mismo periodo del año 2016, de US$ 781 millones, en línea con la menor actividad operacional mencionada anteriormente.
La propiedad de Escondida se divide en BHP (57,5%), Rio Tinto (30%), JECO Corporation (10%) y JECO 2 ltd.