Claudia Tapia, profesora de la escuela La Greda comparó con "una bomba lacrimógena" la nube tóxica que emanó ayer de la Fundición y Refinería Ventanas y que provocó la intoxicación de 20 alumnos, siete profesores y un menor de otro establecimiento de la comuna de Puchuncaví.
Tras presentar síntomas como dolores de cabeza, picazón de garganta y náuseas, muchos fueron diagnosticados por intoxicación por inhalación de gas tóxico.
La docente de La Greda relató a radio Cooperativa que mientras estaba en la sala de clases se pudo "percatar de la nube que iba bajando como neblina, entones los niños comenzaron a sentir picazón en los ojos, escurrimiento de nariz. Lo he comparado como una bomba lacrimógena", dijo.
Tapia además se refirió a la posibilidad de trasladar a la escuela desde La Greda, diciendo que el problema "no se va a resolver". Y que como parte de los docentes del recinto, rechazan la idea de trasladar a los alumnos a diferentes colegios y que" a nosotros nos dispersen, (porque) somos una comunidad educativa y debemos estar todos juntos", consignó.
Previamente, el alcalde de Puchuncaví, Agustín Valencia, precisó que si es necesario, los niños serán relocalizados o se construirá una nueva escuela.
Frente a esto, la profesora de La Greda sostuvo que el edil viene hablando de algo que ocurre hace 40 años y para lo que aún no se ha hecho nada.
La situación vivida ayer obligó a la suspensión del recreo en la escuela y de las clases de educación física que ya antes habían sido modificadas por los niveles de arsénico y cobre detectados en la escuela, que el Ministerio de Salud recomendó reubicar tras conocerse este informe preliminar.